En 2017, buena parte de los internautas conocían a Adam Ellis como el ilustrador estrella de BuzzFeed. Pero de pronto, uno de sus post en X (antes Twitter), lo hizo famoso por otra razón. El artista comenzó a narrar el cómo lo que empezó siendo una pesadilla recurrente, pronto se convirtió en una experiencia aterradora a todo nivel.
Eso, cuando una presencia misteriosa, que al parecer les seguía a todas partes, comenzó a manifestarse de forma física a su alrededor. Lo que es aún más siniestro: volverse tan real, como para que Ellis pudiera fotografiar, grabar e incluso, interactuar de cierta forma con el supuesto fantasma. Nacia una de esas leyendas urbanas recientes.
Todo lo anterior quedó registrado, tanto en su timeline de Twitter, como en varios videos de la plataforma e, incluso, en una película. Dear David, estrenada en 2023, contaba, en esencia, la historia que el dibujante compartió en sus redes sociales. Pero también, llevaba el relato a una nueva dimensión.
La de convertirse en parte de las más singulares leyendas urbanas de internet. Una, además, capaz de abarcar la obsesión de toda una generación por el ámbito de lo misterioso, ahora relacionado con las herramientas de comunicación contemporáneas.
Pero, por supuesto, no se trata de la única historia extravagante que se ha convertido en parte de la historia de la web y el mundo online. Te dejamos cinco de las leyendas urbanas más descabelladas de internet.
De una exploración a la esencia misma de la web tal y como la conoces, pasando por un rumor convertido en leyenda por derecho propio, hasta un relato de terror. Toda una colección de perspectivas pocos comunes acerca de lo que habita más allá de la pantalla del ordenador.
La internet ha muerto
Una de las leyendas urbanas más controvertidas — después, también transformada en teoría de la conspiración — insiste en que todo el contenido en internet, es artificial. En otras palabras, que desde hace algunos años, todo lo que se publica es creado por bots, robots y más recientemente, inteligencia artificial.
Lo que apuntaría que internet — tal y como fue concebida para el intercambio entre la población del mundo — murió. Y que fue sustituida por una copia, destinada a mantener a los usuarios y cualquiera con la capacidad de encontrarse conectado, aislado y manipulado por discusiones y polémicas prefabricadas.
Se trata de una discusión de vieja data, que terminó por volverse una tendencia de debate en el foro Macintosh Cafe de Agora Road en 2021. Pero las primeras insinuaciones que todo lo que se comparte es falso y alienado con tendencias de poder, apareció en 4Chan, en 2017.
Con la llegada de las grandes plataformas, la leyenda urbana se transformó para dar paso, a la posibilidad que este paisaje de información falsa se convierta en dinero. Eso, al lograr influir en los clics y likes, para ventaja de corporaciones, publicidad y otros agentes de poder.
¿Qué hay de cierto en la leyenda?
Según varios estudios, encabezados por la cadena de seguridad informática Imperva, la mitad del tráfico de internet es consecuencia de bots. No obstante, el mismo estudio aclara que puede ser identificados y que, de hecho, es un problema con el que la mayoría de las plataformas luchan.
Aun así, buena parte de los contenidos — y la reacción que los usuarios tienen hacia cualquiera de ellos — son orgánicos. Lo que quiere decir que aunque internet es campo fértil para juegos y prácticas de dudosa ética, todavía la mayoría de los usuarios son seres humanos.
El ocultamiento de vida extraterrestre
Esta leyenda urbana, que tiene docenas de variaciones distintas, coincide en un punto: los gobiernos más poderosos del mundo, han tenido contacto extraterrestre. Mucho más, que esa posibilidad se extiende hasta el hecho, que se trate de una comunicación sostenida, que ha permitido a diversos entes de poder, obtener tecnología y armas hipertecnificadas. Lo que hace que cualquier avistamiento de los ahora llamados FANI (fenómenos anómalos no identificados), deba ser ocultado por un complejo aparato de poder.
La leyenda urbana — que es una de las más antiguas, recurrentes y elaboradas — abarca desde organizaciones gubernamentales dedicadas a perseguir testigos hasta colaboraciones con criaturas alienígenas. Todo, envuelto en la insistencia de negar, minimizar y menospreciar cualquier huella, pista o indicio que conduzca a dudar de la versión oficial. Esta es: que todavía no hay una forma de demostrar que hay vida inteligente más allá de nuestro planeta.
¿Qué hay de cierto en la leyenda?
Por disparatado que parezca, se trata de una leyenda urbana tan extendida, que se relaciona, incluso, con debates en el congreso estadounidense y hasta, procesos legales para acceder a información sobre el tema.
De hecho, en 2023, hubo una audiencia protocolar en el Congreso, con la participación de David Grusch, un oficial de la Fuerza Aérea de Estados Unidos y exagente de inteligencia. Durante su alocución, el funcionario afirmó que, sin lugar a dudas, EE. UU. estaba en posesión de pruebas y lo que llamó “material no humano”.
No obstante, no hay pruebas — más allá de los testimonios de diferentes científicos y miembros del ejército bajo juramento — de esa posibilidad. En realidad, la leyenda urbana puede rastrearse hasta Nuevo México, en 1947. Eso, hasta el conocido suceso de un objeto no identificado que se estrelló en la región.
Luego de décadas de debates, el gobierno estadounidense admitió que se trataba de parte del proyecto Mogul. Este, abarcaba una serie de globos aerostáticos, diseñados para vigilancia y espionaje. Con todo, y a pesar del informe detallado de la Fuerza Aérea norteamericana, la leyenda sobre una nave alienígena en poder del gobierno, dio pie a toda una serie de especulaciones. Que, todavía se mantienen vigentes en la actualidad.
El chico que terminó en la cuarta dimensión
El 5 de enero de 2010, el YouTuber xkcdHatGuy, publicó su primer video en su canal de la plataforma. Titulado La cuarta dimensión explicada por un estudiante de secundaria, profundizaba a detalle en complejos conceptos de física cuántica.
Pero lo hacía de una manera tan amena, interesante y accesible, que, de inmediato, se convirtió en una celebridad de internet. Mucho más, en una de las voces más interesantes de la poco explotada vertiente juvenil de la divulgación científica para una nueva generación.
Aunque nunca fue un creador de contenido muy constante, HatGiu publicó más videos, siempre centrados en teorías de física teórica. Lo más sorprende resultaba, que a pesar de que parecía un adolescente, su conocimiento científico era vasto y profundo. Tanto como para seis meses después, su contenido acumulara más de diez millones de visitas. Una cifra que en los siguientes tres años no hizo más crecer.
Entonces, ocurrió lo inexplicable. El 20 de diciembre de 2013, el usuario compartió su último video y entonces desapareció. Lo que incluyó que su canal de YouTube pareció permanecer simplemente abandonado. La joven celebridad no tenía gran presencia en internet — más allá de su contenido audiovisual — y la poca que se logró hallar, también carecía de información.
La ausencia de inmediato provocó todo tipo de teorías. La más popular y extendida, que el usuario, del que no se sabía otra cosa que el nombre, había desaparecido en la cuarta dimensión. O en su lado más siniestro, que organizaciones de poder, le habían hecho desaparecer, por explorar en conocimientos que se consideraban peligrosos.
¿Qué hay de cierto en leyenda?
En realidad, la explicación a la desaparición del YouTuber es más sencilla y mundana de lo que podría suponerse. El 4 de septiembre de 2019, HatGuy regresó en un nuevo canal. Y reveló que todo lo ocurrido se debía a un diagnóstico de autismo y depresión. Lo que desencadenó en una crisis de salud mental complicada. Poco después, olvidó la contraseña para acceder a su cuenta y en medio de todos los cambios que requirió la recuperación, abandonó su vocación como divulgador.
En la actualidad, casado y estudiante de medicina alternativa, dedica su tiempo y esfuerzo a encontrar lo que llama la teoría de la salud definitiva. Que no es otra cosa, que una fórmula sencilla para mantenerse cuerdo y físicamente fuerte. Lo que le ha llevado a abandonar la física teórica, para concentrarse en fisiología y medicina.
Los pájaros no son reales
Esta es una de las leyendas urbanas más atípicas y extravagantes de internet. Que, claro está, desembocó en una teoría de la conspiración que abarca la forma en que comprendemos la naturaleza y las relaciones del poder contemporáneas. Según sugiere la premisa, todas las aves son drones especializados en espiar a los ciudadanos — estadounidenses, al principio, mundiales, después — y convertidos en armas sofisticadas.
Más extraño aún, la teoría intenta demostrar su veracidad, explorando en puntos en apariencia misteriosos. Desde el hecho que algunas aves parecen tener patrones de plumas más parecidos a diseños industriales que al colorido natural, hasta la interrogante del comportamiento inusual de algunas especies. Lo cierto, es que esta leyenda urbana es una especie de mirada a lo absurdo y a la obsesión contemporánea por la privacidad. En especial, a la paranoia sobre el uso del poder y sus ventajas.
¿Qué hay de cierto en la leyenda?
Como es de suponer, esta leyenda urbana no tiene nada de cierto. Pero su origen, es quizás de los más interesantes. Birds Aren’t Real es un movimiento desarrollado por Peter McIndoe, que comenzó a difundir la idea como una broma en 2017. ¿La intención? Parodiar la desinformación a través del método de demostrar que cualquier posibilidad, con el apoyo suficiente, puede tomarse por verídica.
Algo en lo que el creador se ha esforzado, comprando vallas publicitarias en la vida real hasta furgonetas rotuladas con su lema. Según McIndoe, su esfuerzo demuestra que las conspiraciones y leyendas, sin sustento, se basan en la credulidad. Pero también, en la arrogancia y la necesidad de grupos de opinión, de imponerse sobre otros.
Las elites y los insectos
En la actualidad, la mayoría de las recomendaciones médicas, incluyen una dieta más saludable. En especial, más relacionada con el consumo de plantas y legumbres. Eso, para fomentar un mejor funcionamiento de algunos órganos y también, de evitar la sobre explotación de los ecosistemas.
Lo anterior, dio lugar a una de las leyendas urbanas más singulares de internet. Según varios foros de internet — incluyendo claro, 4Chan — la intención es obligar a la población a comer insectos. Mucho más, cuando esa necesidad, parece basarse en un nivel de control. Lo que abarca una serie de anécdotas aterradoras sobre la posibilidad que haya todo un mecanismo para controlar a las masas, debilitadas físicas y mentalmente.
Una de las versiones más inquietantes, es que todo lo anterior conduce al llamado Gran Reinicio. Que no es otra cosa que un futuro sistema de gobierno — sostenido desde ahora — en la que el mundo se convierta en lugar esclavizado por poder y conocimiento.
Con información de Hipertextual
