La Agencia Meteorológica Central (CWA) de Taiwán informó que el tifón Kong-rey tocó tierra este jueves en el condado de Taitung, en la costa este de la isla, con ráfagas de viento que superaron los 220 km/h, lo que equivale a un huracán de categoría 4 de acuerdo con la escala Saffir-Simpson, y que hasta ese momento había causado 27 lesionados y dos desaparecidos.
Según las últimas observaciones de la CWA, la tormenta penetró cerca del municipio de Chenggong alrededor de la 13H40 hora local, con vientos constantes de 183.6 km/h en su centro y ráfagas de hasta 226.8. Esta tormenta, con un radio cercano a 320 kilómetros, es la más grande que ha impactado la isla desde el tifón Herb, que entre julio y agosto de 1996 causó más de 800 fallecimientos durante su travesía por Taiwán, China y el archipiélago de las Ryukyu, en Japón.
De acuerdo con pronósticos de la agencia, Kong-rey seguirá su trayectoria por el centro de la isla y alcanzará el Estrecho de Taiwán durante la noche como un tifón de menor intensidad. La CWA elevó la alerta de tifón a nivel marítimo y terrestre para toda la isla, que incluye los archipiélagos adyacentes de Kinmen, Matsu y Penghu, y ha decretado alertas por «lluvias extremadamente torrenciales» en Hsinchu, Taichung, Taitung, Hualien y Yilan.
Por otra parte, según el Comando Central de Operaciones de Emergencia (CEOC, por sus siglas en inglés), la tormenta ha causado 27 lesionados y dos desaparecidos. Más de 8.600 individuos han sido evacuados de nueve condados y ciudades. Kong-rey ha provocado inundaciones, desprendimientos de tierra y derrumbes de árboles y señales de tráfico en diversas zonas de la isla, particularmente en su costa este, donde habita cerca del 5 por ciento de la población de Taiwán.
Igualmente, más de 153.000 viviendas han sufrido interrupciones en el suministro eléctrico y más de 63.500 permanecían sin electricidad a las 12H00 horas (04H00 GMT), según los datos más recientes de la empresa estatal Taipower, que ha movilizado cerca de 10.000 trabajadores para restablecer el servicio lo más pronto posible. Las autoridades decidieron interrumpir las clases y los trabajos administrativos a causa de la tormenta, cancelaron más de 500 vuelos nacionales e internacionales y redujeron el servicio de trenes de alta velocidad.