La relación entre los genes de los neandertales y la forma de los dientes de los humanos actuales es uno de los elementos que logró determinar un estudio realizado por especialistas del Consorcio para el Análisis de la Diversidad y Evolución de Latinoamérica (Candela), que fue publicado este jueves en Current Biology.
Esta investigación incluyó información de 882 voluntarios de Colombia, con ascendencia mixta europea, nativa americana y africana. Entre los datos que recogieron estuvieron las medidas de las coronas dentales, que fueron comparadas con la información genética de los participantes a nivel del genoma.}
De esa manera, fueron identificadas 18 regiones genómicas asociadas a la forma y el tamaño de las piezas dentarias, de las cuales 17 no habían sido previamente relacionadas con las dimensiones de los dientes.
Una de esas nuevas asociaciones es la de un gen heredado de los neandertales debido a que se cruzaron con humanos antiguos. Se trata del gen HS3ST3A1, «cuyo efecto produce la disminución del ancho de los incisivos centrales«, comentó Miguel Delgado, antropólogo y docente de la Universidad Nacional de La Plata, una de las instituciones que participó del estudio. «Este gen se relaciona con el mestizaje con neandertales, revelando así el papel clave de este gen durante la evolución de los humanos modernos y los neandertales», agregó el investigador de la institución bonaerense.
Según el estudio, en general los descendientes de europeos tenían dientes más pequeños.
Trabajo sin precedentes
«Nuestros descubrimientos no arrojaron luz sobre si los genes que identifican la forma de los dientes fueron seleccionados en la evolución debido a ventajas particulares para la salud dental», explicó el profesor del University College de Londres, Andrés Ruiz-Linares, quien añadió que «es posible que los genes hayan sido seleccionados debido a las influencias que tienen en otras áreas y que las diferencias en la forma de los dientes resulten como un efecto secundario».
Por su parte, el autor principal de la investigación, Qing Li, de la Universidad Fudan, de Shanghái, señaló que «algunos de los genes que contribuyen a la variación normal de las dimensiones de los dientes en personas sanas también pueden contribuir a la variación patógena, como la falta de crecimiento de los dientes u otros problemas de salud dental». «Esperamos que nuestros hallazgos puedan ser útiles desde el punto de vista médico, si las personas con problemas dentales concretos pudieran someterse a pruebas genéticas para ayudar en el diagnóstico o si algunas anomalías dentales pudieran tratarse algún día con terapias genéticas», expresó.
Por último, Delgado señaló: «Este trabajo sin precedentes aporta información clave para nuestra mejor comprensión de la arquitectura genética de la morfología dental en homínidos vivos y fósiles, así como de eventos de mestizaje entre humanos arcaicos y modernos, la carga genética de varios de los fenotipos investigados, incluyendo su papel en enfermedades de origen genético».
El Consorcio Candela, que realizó la investigación, está integrado por investigadores de China, Francia, Reino Unido, Colombia, México, EE.UU., Perú, Chile y Argentina, y se encarga de estudiar la evolución de las poblaciones latinoamericanas actuales.
Con información de RT.