En una maniobra que sorprendió al mercado, el Banco Central de Venezuela (BCV) inyectó este lunes 21 de abril un total de 150 millones de dólares (USD) al sistema bancario nacional, lo que representa la intervención cambiaria más significativa en lo que va de 2025. Esta acción, que refuerza la estrategia de contención de la volatilidad cambiaria iniciada en octubre, evidencia la intención oficial de afianzar la estabilidad del tipo de cambio.
Según datos divulgados por la firma Aristimuño Herrera & Asociados, con esta operación la autoridad monetaria acumula una venta total de 300 millones de dólares durante el mes de abril, a la espera de una posible nueva colocación en lo que resta del mes.
Este volumen mensual constituye el más alto registrado en 2025. De acuerdo con el monitoreo de la referida consultora, en enero el BCV intervino con 277 millones de dólares; en febrero la cifra se redujo a 230 millones; y en marzo descendió aún más hasta los 172 millones de dólares, el nivel más bajo en dos años.
Con el acumulado actual, el total de intervenciones del ente emisor en lo que va de 2025 asciende a 979 millones de dólares, una cifra que representa una disminución de 17,94% frente a los 1.193 millones de dólares vendidos en el mismo período del año anterior.
Analistas del mercado interpretan esta ofensiva como un intento del Ejecutivo por enviar una señal de confianza a los agentes económicos, especialmente al sector empresarial, en un contexto donde se busca moderar las presiones sobre el tipo de cambio y acortar la brecha con el mercado paralelo.
En esta decimoséptima intervención del año, el BCV fijó el precio de venta en 92,09 bolívares por euro, lo que equivale a 80,96 bolívares por dólar, tomando en cuenta el tipo de cambio oficial vigente para el lunes 21 de abril. Esta tasa representa un incremento de 3,63% en euros y un alza de 3,31% en bolívares por dólar respecto a la semana anterior.
De forma extraoficial, fuentes del sector financiero indicaron que el ente emisor estaría evaluando priorizar sectores con impacto social en la asignación de divisas. No obstante, señalaron que esta orientación no excluye a otros segmentos, siempre que exista disponibilidad suficiente en la oferta de divisas.
Con información de Banca y Negocios
