Kokichi Akuzawa, un ganadero jubilado de 102 años, ha logrado lo que para muchos sería la cumbre de una vida de aventuras: escalar el monte Fuji. A pesar de su reciente récord Guinness como la persona de mayor edad en alcanzar la cima del pico más alto de Japón, Akuzawa se muestra sorprendentemente indiferente a su hazaña.
«He estado allí y he visto las vistas muchas veces, no fue nada especial», declaró Akuzawa, minimizando el logro de ascender los 3.776 metros de la montaña. Esta es la segunda vez que el centenario conquista el monte Fuji, habiendo subido por primera vez a los 96 años.
Su preparación para esta travesía fue inquebrantable, incluso después de un año de contratiempos de salud. A inicios de 2025, un accidente al escalar una montaña cerca de su hogar y una hospitalización por insuficiencia cardiaca no disuadieron a Akuzawa de su objetivo. «La recuperación fue tan rápida que sus médicos no podían creerlo», comentó su hija, Yukiko.
Con una disciplina férrea, Akuzawa se levantaba al amanecer para caminar y subía una montaña casi cada semana como parte de su adiestramiento. El ascenso al monte Fuji lo dividió en tres días, pasando dos noches en refugios. A pesar de los desafíos de la altitud, que por poco lo hacen abandonar, Akuzawa alcanzó la cima con la ayuda de un grupo de acompañantes, incluyendo a su nieta, quien es enfermera.
Aparte de su impresionante historial como excursionista, Akuzawa, nacido en 1923, es voluntario en un centro de atención a personas mayores y enseña pintura en su comunidad en Gunma.
Al ser consultado sobre si intentaría el ascenso una tercera vez, su respuesta fue rotunda y sin rodeos: «no».
Con información de agencias
