Hace una semana, aproximadamente, el precio del kilo de queso, lácteo esencial en la dieta de los bolivarenses oscilaba entre los 810 y 860 bolívares, sin embargo, para este fin de semana superó los mil bolívares y la tendencia es a seguir al alza.
Para los consumidores cada vez resulta más cuesta arriba adquirir la alimentación básica para sus familias.
Ante este contexto, entre quejas, lamentos y la pregunta del millón: ¿Por qué está aumentando todo a diario?, quienes acuden a hacer sus compras y dependen de un sueldo quincenal o semanal, hacen maromas para adquirir los alimentos y no suprimir algunos productos esenciales de su alimentación.
“Cada vez es más difícil comprar. En lugar de llevarme un kilo de queso, compraré medio kilo. Es la única forma de rendir el dinero”, dijo Carmen Estrada, consumidora entrevistada.
Por su parte, quienes expenden este producto manifiestan que el principal factor que afecta el precio al consumidor final es la necesidad de comprar la mercancía en dólares y para poder hacerse de las divisas deben adquirirla a precios más elevados.
Gledis Bonilla



