Delegaciones de alto nivel de Estados Unidos y China iniciaron este domingo en Madrid, una ronda crucial de conversaciones para intentar resolver diferencias comerciales y de seguridad antes de que expiren importantes plazos, como la tregua arancelaria y el permiso de operación de TikTok en territorio estadounidense.
Las reuniones, que se extenderán hasta el 17 de septiembre, contarán con la presencia del secretario del Tesoro de EE. UU., Scott Bessent, y el vice primer ministro chino, He Lifeng. Este encuentro es la cuarta ronda de contactos de alto nivel entre ambas potencias, tras las celebradas en Ginebra, Londres y Estocolmo.
Puntos clave sobre la mesa de negociaciones
Aranceles, controles de exportación y TikTok son los temas centrales de la agenda. El encuentro busca no solo avanzar en estos asuntos, sino también preparar el camino para una posible cumbre entre los presidentes Donald Trump y Xi Jinping a finales de octubre en Gwangju, Corea del Sur, durante el foro de la APEC.
El futuro de TikTok: La fecha límite para que ByteDance, la empresa matriz de TikTok, se desvincule de la aplicación en EE. UU. coincide con el cierre de las negociaciones, el 17 de septiembre. El gobierno estadounidense ha expresado su preocupación por la seguridad nacional, aunque China ha negado haber solicitado alguna vez a sus empresas la recopilación de datos de forma ilegal.
Tregua arancelaria: La suspensión de nuevos gravámenes, que se extendió hasta noviembre, también está en el centro del debate. Aunque un acuerdo anterior redujo aranceles, las tensiones persisten, especialmente con las amenazas de Trump de imponer nuevas medidas si Pekín no garantiza el suministro de minerales estratégicos o si continúa su apoyo a Rusia.
Según el Departamento del Tesoro de EE. UU., las conversaciones también abordarán la cooperación en la lucha contra el lavado de dinero, un problema que afecta a ambos países.
Un canal de comunicación que se fortalece
La prensa oficialista china, como el diario Global Times, ha destacado que esta reunión demuestra que los mecanismos de comunicación entre las dos mayores economías del mundo se están convirtiendo en algo “rutinario”, lo que aporta «previsibilidad y certeza» a sus relaciones. Sin embargo, expertos chinos han instado a Washington a mostrar «sinceridad» en las negociaciones, advirtiendo que las políticas «unilaterales y de presión» no facilitarán la consecución de acuerdos.
A pesar de los avances, la relación económica entre ambos países muestra signos de debilidad. En los primeros ocho meses de 2025, el comercio bilateral ha caído un 13,5% interanual, aunque EE. UU. sigue siendo el tercer socio comercial de China.
La presión es alta para ambas delegaciones, ya que los resultados de estas negociaciones determinarán el rumbo de la relación bilateral en los próximos meses.
Con información de agencias



