Con la participación de más de tres mil líderes, activistas, científicos, académicos y representantes del poder popular de 65 países, se instaló en Caracas el Congreso Mundial en Defensa de la Madre Tierra. Este encuentro internacional posiciona a Venezuela como el epicentro global del debate y la acción urgente por la protección del planeta y la búsqueda de modelos de desarrollo sustentable.
Llamado a un nuevo paradigma y a la cooperación global
La vicepresidenta sectorial de Ciencia, Tecnología, Educación y Salud, Gabriela Jiménez Ramírez, destacó la necesidad de una transformación radical del paradigma ambiental. «Reconocemos a la Tierra y sus componentes como un ser vivo, con derechos inherentes como la vida, la regeneración de sus ciclos vitales, la diversidad, y la vida libre de contaminación”, enfatizó.
La ministra Jiménez Ramírez, también abordó los alarmantes efectos de la crisis climática sobre la salud pública, la actividad agrícola y la biodiversidad, al tiempo que resaltó la importancia de la solidaridad y la cooperación entre pueblos y gobiernos para hacer frente a estas consecuencias. Además, compartió un estudio con comunidades yanomamis de Venezuela, cuyos resultados positivos en su microbiota demuestran la importancia de la relación con el entorno natural y los hábitos alimenticios.
Finalmente, exhortó a los participantes a fortalecer la defensa de la biodiversidad afectada por el modelo capitalista-neoliberal, al que señaló de imponer una agenda de destrucción, extractivismo y amenazas bélicas.
Unidad de los pueblos indígenas y propuesta consolidada
Por su parte, la ministra para los Pueblos Indígenas, Clara Vidal, hizo un llamado a la unidad de criterios e ideas en defensa de la Madre Tierra, afirmando que «destruirla es acabar con la historia».
La ministra Vidal consideró un honor la presencia de los pueblos originarios, destacando su espiritualidad y fuerza para defender el planeta. Agradeció al Gobierno Bolivariano y al equipo organizador, e hizo un llamado a todos los pueblos indígenas del mundo para salvar el planeta. La ministra expresó su esperanza de que del Congreso surja una «hermosa propuesta unificada rumbo a una COP30».
Propuestas internacionales y enfoques culturales]
El vicepresidente del Estado Plurinacional de Bolivia, David Choquehuanca, instó a las delegaciones a crear mecanismos de fiscalización, transparencia y sanciones para quienes atenten contra el ambiente y promuevan la crisis climática, señalando al capitalismo como la causa histórica de la dominación y el sometimiento ambiental.
Desde la perspectiva cultural, el ministro para la Cultura, Ernesto Villegas, anunció que se acogió el concepto de «zonas bioculturales» para eliminar la «absurda barrera» entre lo biológico, el ecosistema y las dinámicas culturales. Villegas resaltó la importancia del mar Caribe como uno de esos espacios vitales, al que definió como «el centro de nuestra América», y donde «se debate el destino de la humanidad».
La educación ambiental como tema cultural
El ministro para el Ecosocialismo, Ricardo Molina, planteó que la educación ambiental debe ser un proceso de formación transversal en los sistemas formal e informal. Explicó que este tema debe ir más allá de celebraciones puntuales, buscando que la población entienda que «es un tema cultural, es un modo de vivir, de establecer cómo vivimos en armonía con la madre tierra”.
Hacia una agenda global por la vida
El Congreso Mundial en Defensa de la Madre Tierra se extenderá hasta el viernes 10 de octubre. Se espera que en la tarde de hoy se conformen nueve mesas de trabajo para debatir propuestas concretas en temas como justicia ambiental, soberanía ecológica, educación ecosocial y defensa de los territorios.
Las plenarias, intercambios y declaraciones conjuntas buscan articular una agenda global por la vida y contra el extractivismo depredador.
Con información de agencias



