El empresario Elon Musk ha hecho unas declaraciones que marcan un hito en la visión futura de Tesla, al adelantar que su robot humanoide de propósito general, Optimus, está destinado a convertirse en el «mayor producto de la historia», superando incluso a los teléfonos móviles.
En un anuncio que subraya las gigantescas ambiciones de la compañía en el sector de la robótica y la inteligencia artificial, Musk reveló planes para la producción masiva del autómata, a pesar de que Optimus se encuentra todavía en fase de desarrollo y sin aplicaciones comerciales concretas hasta la fecha.
Planes de producción a escala sin precedentes
Para lograr esta meta, se establecerán líneas de montaje con capacidades de producción masiva:
Fremont, California: Se instalará una línea de montaje en la planta de automóviles con una capacidad de fabricación de un millón de unidades de Optimus al año.
Austin, Texas: Se prevé una segunda línea en la planta de Austin, con la asombrosa capacidad de producir hasta 10 millones de unidades anualmente.
Una visión transformadora
Musk no escatimó en audacia al proyectar el impacto a largo plazo de Optimus, afirmando que prevé que habrá miles de millones de unidades en el futuro, las cuales serán capaces de «erradicar la pobreza del mundo».
El empresario sostuvo que Tesla es la única empresa preparada para lograr estos objetivos. «Tesla ya es el mayor fabricante de robots del mundo porque cada vehículo es un robot», explicó, para luego añadir que «Optimus es un robot con brazos y piernas en vez de un robot con ruedas».
Con estas declaraciones, Tesla se posiciona de forma agresiva en el emergente mercado de la robótica humanoide, esperando replicar el éxito de su división automotriz y redefinir su identidad como un líder en Inteligencia Artificial y la fabricación de autómatas a escala global.
Con información de agencias



