La firma tecnológica estadounidense OpenAI enfrenta un riesgo significativo de incumplir sus compromisos de gasto multimillonarios debido a una frágil estructura financiera y una alta dependencia de acuerdos con grandes proveedores tecnológicos, según advirtió Gil Luria, jefe de investigación tecnológica de D.A. Davidson.
Este escenario, marcado por la inestabilidad financiera de OpenAI y su necesidad de capital, podría tener un efecto dominó que pondría en riesgo a varias empresas clave dentro del ecosistema de la Inteligencia Artificial (IA) que dependen directamente de sus pedidos y contratos.
Vulnerabilidad y dependencia de proveedores
La advertencia de Luria surge tras las recientes declaraciones de la directora financiera de OpenAI, Sarah Friar, quien inicialmente manifestó que la tecnológica esperaba respaldo federal del Gobierno de Estados Unidos para financiar sus enormes compromisos de infraestructura.
Aunque Friar se retractó posteriormente, aseverando que no buscan garantías gubernamentales, y el CEO Sam Altman lo refrendó, indicando que los contribuyentes no deberían rescatar a empresas privadas, el analista Gil Luria sostiene que sin una intervención o «ayuda» del Gobierno de EE.UU., OpenAI no tendría la capacidad de cumplir sus compromisos de gasto.
La principal preocupación es que la compañía aún no es rentable y no se espera que genere un flujo de efectivo positivo antes de 2029. Esto, según Luria, limita su competitividad frente a gigantes como Microsoft o Alphabet (matriz de Google), y genera una gran presión sobre sus socios comerciales.
Gigantes tecnológicos en la línea de fuego
El riesgo financiero de OpenAI afecta directamente a varias grandes corporaciones con acuerdos de alto valor. Según el análisis, si el gasto de OpenAI se desacelera, estas compañías podrían experimentar caídas abruptas en ingresos y valuaciones.
Las empresas más expuestas
Oracle: En septiembre pasado firmó un contrato de cinco años valorado en 300.000 millones de dólares en capacidad de cómputo. Este acuerdo impulsó sus acciones un 36% en un día antes de una posterior caída.
Broadcom y Advanced Micro Devices (AMD): Ambas mantienen acuerdos de desarrollo de chips personalizados con OpenAI valorados en miles de millones de dólares. Si los pedidos de OpenAI se detienen, estas empresas sufrirían un impacto directo en sus ingresos.
CoreWeave: Proveedor de servicios de nube respaldado por Nvidia.
Oklo: Empresa de energía nuclear en la que el CEO de OpenAI, Sam Altman, es un inversionista clave.
El mercado se mantiene optimista sobre el avance de la IA, pero la precaria situación financiera de OpenAI, una de sus líderes plantea serias dudas sobre la sostenibilidad de los grandes acuerdos y el futuro inmediato de sus socios estratégicos.
Con información de agencias
