El presidente de Bolivia, Rodrigo Paz, informó este jueves que su gobierno suprimirá el Ministerio de Justicia, una decisión que llega tras las tensiones internas surgidas por la designación del titular de esa cartera.
El cargo, que en las últimas semanas había generado disputas y señalamientos, termina así en el centro de una de las reestructuraciones más profundas de la administración Paz.
En una declaración contundente, el jefe de Estado subrayó: «Se acabó el ministerio de la persecución, se acabó el ministerio de la injusticia, (…) se acabó el ministerio que era de cómo chantajear a la sociedad desde el poder político. (…) No habrá más persecución política.
El Ministerio de Justicia ha muerto y lo vamos a enterrar bien para que no vuelva el terrorismo de Estado a perseguir a los bolivianos y bolivianas».
Paz defiende la medida como parte de una reforma institucional
Durante una rueda de prensa, el mandatario justificó la eliminación de la cartera como un paso necesario para “despolitizar” las instituciones judiciales. Según afirmó, «este paso se da para darle las garantías al sistema judicial de sus reformas» y abre la puerta para «trabajar de forma conjunta con todas las instituciones del país en función de la justicia».
Paz insistió en que «si no hay justicia en Bolivia, no hay democracia» y que, «si la justicia es mala, la democracia es mala».
El anuncio se realizó junto a Jorge Franz García, quien había condicionado su aceptación del cargo precisamente a la desaparición del Ministerio de Justicia. Esa eliminación formaba parte de los compromisos asumidos por Paz durante la pasada campaña presidencial.
Con información AP
Eliminan el Ministerio de Justicia en Bolivia y proclaman el fin de la “persecución política”



