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viernes, diciembre 26, 2025

Rusia desarrolla un fármaco para el tratamiento de Parkinson

Investigadores del Centro de Reprogramación Genética y Terapia Génica han anunciado el desarrollo de un nuevo fármaco para combatir la enfermedad de Parkinson, un avance que abre una nueva esperanza frente a este trastorno neurodegenerativo crónico que, hasta la fecha, no tiene cura definitiva.

​El nuevo fármaco entra ahora en su fase de estudios preclínicos. Este desarrollo es parte de una ofensiva científica mayor del Centro, que también trabaja en medicamentos genoterapéuticos diseñados para ser eficaces y seguros en el tratamiento de la atrofia muscular espinal (AME), buscando establecer estándares inéditos en la terapia génica moderna.

​La urgencia de estos hallazgos se ve respaldada por proyecciones globales alarmantes. Según estudios recientes, se estima que los casos de Párkinson aumentarán un 112 % para el año 2050, pasando de los 11,9 millones registrados en 2021 a aproximadamente 25,2 millones de personas en todo el mundo.

​El ARN Mensajero como arma contra el Cáncer
​Paralelamente a los avances en neurología, el Centro Nacional de Investigación de Epidemiología y Microbiología Gamaleya ha marcado un hito en la oncología. La institución confirmó la producción de las primeras tres series de prueba de una vacuna contra el cáncer.

​Estas vacunas utilizan la tecnología de ARNm (ARN mensajero), la misma plataforma que revolucionó la medicina recientemente y que hoy es considerada la herramienta más prometedora para personalizar terapias y atacar células tumorales de manera específica.

​»Estamos ante un cambio de paradigma donde la reprogramación genética y el ARNm nos permiten no solo tratar síntomas, sino abordar la raíz biológica de enfermedades que antes considerábamos imbatibles», señalan fuentes cercanas al proyecto.

​Sobre la enfermedad de Parkinson
​El Parkinson es una afección del cerebro que provoca alteraciones del movimiento (temblores y contracciones dolorosas), así como trastornos mentales, del sueño y dolor crónico. Ante la falta de una cura definitiva, el desarrollo de fármacos genéticos rusos se posiciona como una de las investigaciones más relevantes de la década.

Con información de agencias

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