La luz verde dada a Madonna para la adopción de gemelas en Malaui suscitó críticas de organizaciones caritativas en este país de África austral del que son originarios otros dos hijos de la cantante, adoptados en 2006 y 2009.
El martes, el tribunal de Lilongwe autorizó a la estrella pop a adoptar dos gemelas de cuatro años, Esther y Stella, de un orfanato de Mchinji, en el centroeste del país, cerca de la frontera con Zambia.
Madonna ya había adoptado a un varón, David Banda, en 2006 en el mismo orfanato, y tres años después, siempre en Malaui, a una niña, Mercy James.
En 2006, creó la fundación Raising Malawi, que se ocupa en particular de huérfanos de ese país africano y de construir hospitales.
«Debería tener un acercamiento diferente ayudando a las familias desfavorecidas con niños en lugar de adoptarlos», estima ante la AFP Maxwell Matewere, director de «Ojos para los Niños», una organización caritativa en Malaui.
«A la mayoría de las familias le gustaría criar a su hijos en su hogar si tuvieran apoyo financiero», agrega.
«Madonna da una visión de que Malaui tiene un mercado de niños pobres listos para ser adoptados», se queja Ken Mhango, director para Malaui de la Red africana para la protección y la prevención de abusos a los niños (ANPPCAN).
Según la decisión judicial, que la AFP consultó este miércoles, Madonna se sintió «obligada» a adoptar a estas gemelas. La jueza Fiona Mwale, quien dio la autorización, dijo que el trabajo de Madonna en los orfanatos la llevó a sentir «la obligación de llenar el vacío en la vida» de las niñas y «abrirles su hogar».
Vida lujosa
Ella podrá brindarles «un domicilio lujoso, espacioso y confortable en un barrio acomodado», agrega la decisión.
La magistrada añade que pese a que Madonna, de 58 años, está «por encima de la edad considerada normal para tener niños», pasó con éxito una prueba médica para acreditar su buena salud.
Las niñas fueron internadas en el orfanato tras la muerte de su madre, poco después de su nacimiento; su padre abandonó el hogar para volver a casarse y su abuela no dispone de lugar para ellas.
El padre, identificado por las iniciales A.M, dio su acuerdo para esta adopción, y aceptó «renunciar de manera permanente» a sus derechos parentales, sin compensación financiera.
La cantante, presente en el tribunal el martes, rodeada de una importante escolta policial y guardaespaldas privados, aún no ha hecho comentarios sobre estas adopciones.
A fines de enero, cuando la justicia anunciara que estudiaba una demanda de Madonna, la cantante desmintió cualquier proyecto de adopción, afirmando que había viajado a Malaui solo para ocuparse de su fundación.
Sus estadías regulares en este pequeño país pobre del África austral han estado rodeadas de controversias.
En 2013 en particular, el entonces presidente, Joyce Banda, le reprochó comportarse con las autoridades del país como si fuera una conquistadora, reclamar un tratamiento VIP injustificado y jactarse excesivamente de su generosidad hacia Malaui.
Pero tras la partida de Banda en 2014, las relaciones de la estrella con el nuevo presidente, Peter Mutharika, han mejorado, al punto de afirmar que su gobierno «estará siempre reconocido por la pasión de Madonna hacia el país».
Con información de: Panorama.com.ve