Una ola de ataques no esclarecida dejó varios autobuses incendiados en la ciudad de Fortaleza, en el noreste de Brasil, según informaron este jueves varios medios locales.
Al menos tres comisarías y un banco fueron además atacados a tiros en la región, según el portal «Globo». Los atacantes prendieron en total fuego al menos a 21 autobuses del servicio público entre el miércoles y jueves, mencionó DPA.
Las fuerzas de seguridad detuvieron a seis personas por lo ocurrido, según la estatal Agencia Brasil. Los motivos de los ataques no estaban claros.
En Fortaleza se especulaba con represalias de un grupo criminal por cambios con medidas más estrictas en la rutina de varias cárceles de la región, en el estado de Ceará, aunque las autoridades no confirmaron aún esa hipótesis.
«No hay nada que indique que todos los ataques fueron hechos por un grupo y tampoco hay confirmación de que las personas presas están ligadas a ese grupo», citó Agencia Brasil a la Secretaría de Seguridad Pública de Ceará.
En Brasil ya se han registrado en el pasado olas de violencia similares, incluso en la metrópoli Sao Paulo, en relación con poderosos bandas criminales que controlan las cárceles.
El país sudamericano tiene graves problemas por la falta de control interno y el hacinamiento en sus prisiones. En enero, una serie de reyertas por ajustes de cuentas entre grupos criminales dejó más de 120 muertos en varias cárceles.
Con información de: Eluniversal.com