Los resultados de un estudio publicado en la revista Cephalalgia indicaron que la terapia para prevenir la migraña con nadolol o topiramato, mejora significativamente la calidad de vida de los pacientes, aunque aún permanece por debajo del nivel promedio.
El nadolol, que en Estados Unidos se comercializa como Corgard, es un betabloqueante que se usa para tratar la hipertensión y la angina (dolor de pecho). El fármaco reduce la frecuencia cardíaca y relaja las venas.
El topiramato (Topamax), se usa para tratar crisis en pacientes epilépticos.
“La medicación preventiva no debería sólo reducir la frecuencia de los ataques, sino también mejorar la calidad de vida de los pacientes”, escribió el equipo dirigido por el doctor Juan C. García-Monco, de Hospital de Galdacano, en Vizcaya, España.
Para investigar el tema, el equipo estudió a 76 pacientes con migraña más de 16 años; los evaluó al inicio del estudio y a las 16 semanas de tratamiento con 40 miligramos de nadolol o 100 miligramos de topiramato por día. El estudio finalizó con 61 pacientes.
La terapia preventiva mejoró significativamente la salud física de los pacientes, según el Formulario Corto 36 de la Escala de Salud, una prueba estándar que se usa para evaluar varios aspectos médicos de los pacientes.
La salud mental, sin embargo, permaneció sin cambios, pero todos los aspectos de la salud estuvieron por debajo del nivel de calidad de vida de la población general.
Los resultados de la Escala de Ansiedad y Depresión Hospitalarias mostraron un estado de ansiedad leve y un estado de depresión moderado al inicio del estudio, los que permanecieron sin cambios después de la terapia.
El resultado del cuestionario de calidad de vida relacionada con la migraña mostró una mejora estadísticamente significativa con el tratamiento.
“Después de la evaluación general del efecto de la medicación preventiva sobre la calidad de vida de los pacientes, se evaluó el efecto de cada fármaco mediante el análisis de la ganancia terapéutica por separado”, explicó el equipo.
No se observaron diferencias entre ambos fármacos en ningún aspecto de la salud evaluado con los cuestionarios. La única excepción fue una mejor respuesta física del topiramato que del nadolol, según el Formulario Corto 36 de la Escala de Salud.
El equipo concluyó que a pesar de estas mejoras, se necesitan más esfuerzos para “que estos pacientes vuelvan a recuperar una salud lo más normal posible”.
Con información de: Noticias24.com