La Comisión Europea ha impuesto este jueves una multa de 110 millones de euros a Facebook por haber proporcionado datos “incorrectos o engañosos” en la compra de WhatsApp, operación a la que Bruselas dio el visto bueno en 2014
La Comunidad Europea argumenta que cuando Facebook notificó la adquisición de WhatsApp en 2014, la sociedad informó a la CE de que “no estaría en medida de establecer de manera fiable la correspondencia automática entre los usuarios de Facebook y los de WhatsApp”, algo que cree probado que es falso ya que los empleados de la red social estaban al corriente de esta posibilidad informó La Vanguardia.
Facebook ocultó datos en la compra
“Es una multa proporcionada y disuasoria”, ha explicado la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, en una declaración en la que subraya que estas actuaciones son una “señal fuerte” a las compañías de que deben “respetar las reglas” de la Unión Europea y proporcionar “información exacta” cuando son investigadas.
Bruselas cree probado que Facebook ocultó que en el momento de la compra ya poseía los avances técnicos necesarios para vincular datos de Facebook y Whatsapp. Es algo que no reconoció en la información remitida a Bruselas e incluso dijo lo contrario en un cuestionario posterior. Sin embargo, ya en de agosto de 2016 WhatsApp ofreció la posibilidad de vincular los números de teléfono asociados a la aplicación a los perfiles correspondientes en Facebook.
La red social reconoce “errores”
Con esta base, el Ejecutivo comunitario abrió formalmente un expediente a Facebook con el envío de un pliego de cargos en diciembre de 2016, en el contexto de una investigación que culmina ahora. “Los errores que cometimos en nuestros registros de 2014 no fueron intencionados y la Comisión ha confirmado que no afectaron al resultado del examen de la fusión”, indicó un portavoz de Facebook. La red social asegura que actuó “de buena fe” y que trató de “proporcionar información precisa en cada momento”.
No afecta a la compra
Con todo, Bruselas ha aclarado que esta sanción no afecta a la operación de compra, que fue aprobada teniendo en cuenta “una serie de elementos distintos” a la capacidad para vincular los perfiles de los usuarios de las dos redes sociales y que barajó en los escenarios estudiados para dar luz verde la hipótesis de que tuvieran esa capacidad técnica.
Se trata de la primera vez que la CE adopta la decisión de multar a una empresa por proporcionar información inexacta o engañosa desde la entrada en vigor de este reglamento, en 2004.
