Según un estudio publicado en la revista médica The BMJ, se reveló que el consumo de alcohol, incluso en niveles moderados, se asocia con un incremento del riesgo de daños cerebrales e incluso deterioro cognitivo.
Sus autores, un grupo de investigadores británicos de las universidades de Oxford y College London, añaden que el trabajo respalda la reciente reducción de la orientación del alcohol en el Reino Unido y cuestiona los límites actuales recomendados en Estados Unidos.
Multitud de estudios han analizado las consecuencias nocivas para el cerebro de una ingesta excesiva de alcohol, pero muy pocos lo han hecho sobre un consumo moderado, sostuvieron los autores.
Por ello, decidieron lanzarse a examinar si una ingesta comedida de bebidas alcohólicas tiene consecuencias positivas, negativas o nulas en la estructura y la función del cerebro.
El estudio considera que una unidad de alcohol equivale a 10 mililitros. Las 14 unidades que se consideran un consumo moderado, corresponden a cuatro pintas (de algo más de medio litro cada una) de cerveza fuerte o cinco copas de vino (175 ml) de 14 grados.
El mayor consumo también se asoció con una menor integridad de la sustancia blanca (crítica para el funcionamiento cognitivo eficiente) y un descenso más rápido de la fluidez del lenguaje (cuántas palabras que comienzan con una letra específica se pueden generar en un minuto).
Los autores señalaron que se trata de un estudio observacional, por lo que no se pueden sacar conclusiones firmes sobre la causa y el efecto, aunque apuntaron que lo descubierto sí puede tener «importantes implicaciones potenciales» sobre la salud de un gran sector de la población.
Nota tomada de Globovision.com