Varias empresas e instituciones europeas, incluyendo la naviera danesa Maersk, la petrolera rusa Rosneft y la firma británica de publicidad WPP, han sido víctimas de un ciberataque masivo protagonizado por el virus Petya variante de Wannacry , el ransomware que afectó a miles de ordenadores de todo el mundo el pasado mes de mayo.
El ataque empezó en Ucrania, el país más perjudicado, donde ha alterado el funcionamiento normal de bancos y aeropuertos. En las pantallas de los ordenadores aparece un mensaje extorsionador en el que se exige un rescate de 300 dólares en bitcoins para que el usuario pueda volver a acceder a su dispositivo.
“Si ves este texto, entonces ya no tienes acceso a tus archivos, ya que han sido cifrados. Tal vez estás ocupado buscando una manera de recuperar tus archivos, pero no pierdas el tiempo. Nadie puede recuperar sus archivos sin nuestro servicio de descifrado”, reza el mensaje.
La variante del virus ‘Petya’ pide un rescate para acceder al equipo y recuperar los archivos
El Centro Criptológico Nacional, dependiente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), ha confirmado el ciberataque y ha señalado que, por el momento, no ha afectado a ninguna administración pública en España.
En Rusia, Rosneft, uno de los mayores productores de petróleo del mundo, dijo que fue víctima de un “fuerte ataque “, pero aseguró que su producción no había sido interrumpida. La siderúrgica Evraz también ha sido atacado, dijo un portavoz de la agencia de noticias RIA-Novosti.
Con sede en Londres, WPP, la agencia de publicidad más grande del mundo, fue el primero en suelo británico en informar de los problemas. La multinacional ha comunicado que varias de sus empresas se han visto afectadas por “un presunto ataque informático”, señalando que la compañía ha adoptado las medidas apropiadas. El Centro de Ciberseguridad Nacional del Reino Unido, integrado en los servicios de inteligencia británicos, también confirmó un “incidente global de ransomware” y aseguró que está “monitorizando la situación”.
También ha sido atacado el gigante danés de transporte marítimo Moller-Maersk, lo que afecta a sus operaciones en el Puerto de Barcelona. “Podemos confirmar que los sistemas se han caído en múltiples sitios y unidades de negocio debido a un ciberataque”, ha confirmado la compañía danesa, indicando que continúa “analizando la situación”.