Viajar sola tal vez sea una de las experiencias más desafiantes de la vida. Te enfrentas a tus miedos y reflexionas sobre tu vida y lo que ocurre en el mundo cotidiano.
Seguramente los primeros días serán difíciles y pensarás has hecho es el peor error de tu vida, pero mientras avanza tu aventura te darás cuenta de todos los beneficios que tiene ese viaje, lleno de reflexiones y situaciones extraordinarias que con otra persona nunca hubieras logrado hacer.
Desde 2012 Kristin Addis ha viajado por todo el mundo. Y lo ha hecho sola. Hace cinco años que dejó su profesión de banquera de inversión, vendió sus cosas y se lanzó a la carretera. Desde entonces ha vivido en silencio en un monasterio budista, ha caminado entre gorilas por Uganda y ha visitado los glaciares de la Patagonia.
“Tomas todas las decisiones. Te despiertas un día y dices: ‘¡Quiero ir ahí!’. O ‘Me gusta mucho aquí, creo que me quedaré cinco días más’, y no necesitas preguntarle a nadie qué opina”, afirma.
“Te sentirás mucho mejor en la resolución de problemas, porque aprendes que no sirve de nada llorar ya que nadie va a venir a arreglarlo“, relata.
A Continuación te decimos las razones para viajar solo:
Comienza poco a poco: Si nunca has viajado solo y estás considerando hacerlo, primero podrías hacer un viaje corto. “Si vas a hacer un gran viaje en solitario, tus amigos y familiares podrían tratar de convencerte de que no lo hagas. Es una manera de demostrar que sí que puedes”, manifiesta.
Elige un destino social: Si lo que te preocupa es viajar solo, Addis sugiere que visites un lugar bastante popular entre los viajeros solitarios, como el Sudeste Asiático, Centroamérica o Sudáfrica. Allí puedes conocer gente de todas las edades y orígenes, por lo que hay muchas opciones de conectar con otras personas. Hagas lo que hagas, según Addis, evita esos destinos que son conocidos por ser particularmente románticos. “Escogería una parte del mundo donde no vaya a ser como una luna de miel. Como viajero en solitario, eso puede ser difícil”, comenta.
Habla con los locales: ¿Quieres saber lo que hay que ver o lo que hay que comer en una ciudad? Pues pregunta a alguien que viva allí. Si eres tímido y no eres capaz de iniciar una conversación con un extraño, Addis sugiere que vayas a un bar local y hagas el esfuerzo de relacionarte con otras personas. Incluso puedes hacer alpinismo, buceo, surf o senderismo con otros desconocidos.
Prepárate para la cena: Después de pasarse cinco años viajando sola por el mundo, el hecho de comer sola continúa siendo algo muy difícil. “Eso nunca a ser fácil”, confiesa. A veces se dirige al bar del albergue y allí mira si hay algún viajero interesado en comer acompañado. Otras veces se deleita comiendo fuera o tomando algo en cualquier lugar. Siempre existe la opción de quedarse en la barra de un restaurante, donde puede ser más fácil entablar conversaciones con otros comensales o con los camareros. Algunas veces ella se pone a leer un libro en un restaurante y otros viajeros se le unen. “Lo bueno es que si viajas a un lugar que atrae a mucho a otros viajeros, tendrás más opciones de encontrar a personas solas. Eso es lo que realmente me sorprendió… ¡cuántos viajeros solos hay por ahí!”, relata.
Elige lugares dónde el dólar es fuerte: Como no se dividen los costos con otra persona, los viajes en solitario suelen resultar un poco más caros. Así que opta por lugares donde el dólar es fuerte. Por ejemplo, es un buen momento para reservar un viaje a Canadá ya que el valor del dólar está prácticamente igual y se puede cambiar por USD 1.32. El dólar en Singapur ha caído en los últimos años y el cambio se encuentra en USD 1.38. Addis añade que al viajar a zonas de desarrollo económico, como Costa Rica, Camboya, Bali y otros lugares, uno puede aprovechar mucho más el dinero. “Es increíble cómo el dinero duplica o triplica su valor”, expresa.
Utiliza el sentido común cuando se trata de seguridad: Addis se hace muchas preguntas sobre la seguridad. Su consejo: no beber demasiado, no caminar solo si el lugar no es seguro, no tengas miedo en gastar dinero en Uber (la información queda registrada y el viaje es rastreado, a diferencia de un taxi convencional) y confía en tu intuición. Ella reconoce que cuando viaja sola se siente más segura que cuando lo hace acompañada. “Lo mejor de viajar solo es que estás más activo y nadie te distrae. Aunque cuando saben que viajo sola, los lugareños me cuidan mucho más e incluso me invitan a comer con sus familias”, agrega.
Date el placer de viajar solo: Addis cuenta que ella ha encontrado un montón de conceptos erróneos sobre el hecho de viajar solo. Dice que la gente asume que los viajeros solitarios no tienen amigos, o que no se puede viajar si uno no tiene un acompañante o una familia. Ella, por el contrario, asegura que viajar solo es una experiencia que te ilumina y te da poder. Y anima a todos a hacerlo: “Está bien irse, incluso si nadie de tu alrededor te entiende o no está de acuerdo. No necesitas que alguien te acompañe”, asegura.
Nota tomada de Noticias24.com