El lanzamiento se efectuó a las 02:30 locales de este miércoles, desde la base militar Vandenberg hasta el atolón Kwajalein, en el Pacífico. El ensayo demuestra que la actividad nuclear de Estados Unidos «es segura, eficaz y está lista para poder disuadir, detectar y defenderse de los ataques contra EEUU y sus aliados», dijo la Fuerza Aérea en un comunicado.
A menos de una semana de que Corea del Norte lanzara un misil balístico que se cree podía llegar hasta Denver e incluso Chicago, Estados Unidos realizó este miércoles una prueba exitosa de otro misil intercontinental desde la Base de la Fuerza Aérea Vandenberg, en California.
El misil balístico intercontinental (ICBM por sus siglas en inglés) Minuteman III, que no portaba cargas explosivas, fue lanzado desde la Base Aérea Vandenberg, a 93 millas (unos 130 kilómetros) al noroeste de Los Ángeles, a las 02:30 (Pacífico) hasta el atolón de Kwajalein. Fue la cuarta prueba de este año, la más reciente fue en mayo.
«Si bien no es una respuesta a las recientes acciones de Corea del Norte, la prueba demuestra que la actividad nuclear de Estados Unidos es segura, eficaz y está lista para poder disuadir, detectar y defenderse de los ataques contra EEUU y sus aliados», dice la Fuerza Aérea en un comunicado.
La prueba viene en medio de tensiones aumentadas con Corea del Norte. La nación solitaria lanzó su segundo misil balístico intercontinental en un mes el viernes, en una indicación adicional de que sus misiles son ahora capaces de llegar a las ciudades de los Estados Unidos. Los Estados Unidos volaron dos bombarderos B-1 sobre Corea del Sur en una demostración de fuerza en respuesta.
«El propósito del lanzamiento de prueba del ICBM es validar y verificar la efectividad, velocidad y precisión del sistema», se lee en el comunicado de la base, difundido previamente. Los responsables de la prueba fueron los miembros del Escuadrón de Prueba de Vuelo 576.
El portavoz de la Fuerza Aérea, capitán Mark Graff, dijo que el lanzamiento «ofrece (…) la capacidad de evaluar la fiabilidad de nuestra fuerza ICBM con el fin de mantener una capacidad de disuasión nuclear creíble».
El pasado 11 de julio, el Pentágono realizó otra prueba, en esa ocasión del Sistema de Defensa Terminal de Área a Gran Altitud (THAAD), un escudo antimisiles como el que Washington instaló en Corea del Sur y al que se opone China. El sistema interceptó y destruyó un misil de práctica lanzado desde Hawaii hacia Alaska.
La prueba de este miércoles en aguas del Pacífico se realiza apenas días después de que Corea del Norte lanzara un misil que voló unos 45 minutos y alcanzó una altura de 2,300 millas antes de caer en aguas de la isla japonesa Hokkaido.
El Departamento de Defensa de EEUU consideró entonces que se trató de un misil probablemente similar al probado el pasado 4 de julio, un modelo denominado Hwasong-14 y que voló a una altitud de más de 1,700 millas, es decir, siete veces más alto que la Estación Espacial Internacional.
Los cálculos de expertos, realizados por el Proyecto de Defensa de Misiles del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales, con sede en Washington, indican que ese modelo de misil tenía la capacidad de viajar casi 5,000 millas, es decir, que puede dar en un blanco tan lejos como Hawaii o Alaska.
Esa última prueba del régimen de Kim Jong Un ocurrió en un contexto de preocupación entre los organismos de inteligencia de EEUU y Asia, quienes temen que con su arsenal de misiles Corea del Norte pueda llegar a territorio continental estadounidense para el próximo año, específicamente a ciudades de la Costa Oeste.
Días antes de esa última prueba, la Agencia de Inteligencia de la Defensa (DIA), adscrita al Pentágono, dio a conocer al diario The Washington Post una evaluación en la que asegura que Corea del Norte estaría listo para lanzar un misil con una cabeza nuclear capaz de llegar a EEUU tan pronto como el año que viene. El hallazgo reduce dramáticamente el tiempo estimado que se calculaba para la operatividad de un ICBM norcoreano: tres años. El consenso de la comunidad científica es que el progreso mostrado por Kim Jong Un es alarmante.
El punto clave en la carrera armamentística norcoreana está en si su arsenal de misiles puede dar en el blanco. Lo otro que sigue siendo una interrogante es si el régimen norcoreano logró miniaturizar sus bombas atómicas, algo sin lo cual es imposible colocarlas en sus ojivas.
Vía: Univision