Con estos pasos, esfuerzo y dedicación, alcanzaras esa meta tan anhelada y una figura de reina!!!
–Relájate. Cuando estamos estresados, los niveles de cortisol, una hormona esteroidea, se disparan. Y con ellos, el volumen de nuestra tripa, ya que provoca que se acumule grasa en la región abdominal. Un estudio de la Universidad de Yale señaló recientemente que podía aparecer una pequeña tripa originada por el estrés, incluso entre las chicas más delgadas.
–Duerme bien. Un consejo que nos ayudará para muchas cosas (bienestar, felicidad, problemas cardiacos), pero que también influye a la hora de mantener un vientre plano.
–Mastica. Fácil y sencillo, en muchas ocasiones nuestro peor enemigo es la forma que tenemos de ingerir los alimentos. Por dos razones: porque una comida bien masticada ayuda a hacer bien la digestión, ya que acumularemos menos aire en nuestro estómago. Y porque nos conduce a comer menos.
Un estudio de la Universidad de California puso de manifiesto que las personas que habían dado entre 20 y 30 vueltas a la comida en la boca terminaron ingiriendo un 70% de calorías menos que las que masticaban a su ritmo normal.
–Ríete. Cada vez que nos reímos, la pared abdominal se contrae y se relaja tal y como ocurriría si estuviésemos haciendo ejercicio, de manera que sin quererlo y sin sospecharlo, estamos ejercitando la zona del estómago. Esa es una de las razones por las que, por ejemplo, a veces nos duele la tripa de reírnos o llegamos a tener agujetas en la zona tras una tarde divertida.
–Ejercita todo tu cuerpo. En el caso del abdomen, realizar ejercicios sobre esta zona sin preocuparse también por las regiones que la rodean suelen provocar que aquella persona que ha adoptado esta costumbre de ejercicio termine caminando encorvada.
Nota tomada de Noticias24.com