Es cierto que los códigos protocolarios y estéticos se han relajado con el paso del tiempo (gracias, generación millennial) pero ¿acaso no es fácil caer en el temido disfraz por adecuarse a lo que se supone que se espera de una novia? ¿No es sencillo dejarse llevar por el romanticismo o por el deseo de impactar? ¿Cual calzado elegir para ese gran día?.
Olvidar los convencionalismos y lo que se supone que hay que hacer, recurrir al savoir fair de quien hace de la variedad y la calidad su leitmotiv. O lo que es lo mismo, mirar, remirar y buscar la nueva colecciónde primavera-verano de Stuart Weitzman.
Foto:VOGUE
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Nota tomada de Noticias24.com
