En un telegrama de pésame al cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona, Francisco también manifestó su cercanía y apoyo a toda la sociedad española
OMA.- El papa Francisco volvió a condenar hoy la «violencia ciega» implícita en el atentado terrorista que ensangrentó ayer Barcelona y conmovió a Europa, que definió «una acción inhumana» y pidió seguir trabajando «con determinación» por la paz en el mundo.
«Ante la noticia del cruel atentado terrorista que ha sembrado de muerte y dolor La Rambla de Barcelona, el papa Francisco desea expresar su más profundo pesar por las víctimas que han perdido la vida en una acción tan inhumana y ofrece sufragios por su eterno descanso», indicó el telegrama, difundido por la Sala de Prensa de la Santa Sede.
«El Santo Padre condena una vez más la violencia ciega, que es una ofensa gravísima al Creador»
«En estos momentos de tristeza y dolor, quiere hacer llegar también su apoyo y cercanía a los numerosos heridos, a sus familias y a toda la sociedad catalana y española», agregó. «El Santo Padre condena una vez más la violencia ciega, que es una ofensa gravísima al Creador y eleva su oración al Altísimo para que nos ayude a seguir trabajando con determinación por la paz y la concordia en el mundo», siguió. «Con estos deseos, Su Santidad invoca sobre todas las víctimas, sus familiares y el querido pueblo español la bendición apostólica», concluyó.