Donald Trump, pidió al Congreso que se prepare para «hacer su trabajo» con el programa DACA, que ha protegido de la deportación a 800,000 jóvenes indocumentados, conocidos como soñadores.
El presidente de EEUU, Donald Trump, pidió al Congreso que se prepare para «hacer su trabajo» con el programa DACA, que ha protegido de la deportación a 800.000 jóvenes indocumentados, conocidos como «soñadores», y cuyo futuro será decidido hoy por el Gobierno estadounidense.
«¡Congreso, prepárese para hacer su trabajo – DACA!», dijo hoy Trump en un breve mensaje en la red social Twitter.
Con esas palabras, el mandatario pareció confirmar la idea de que hoy su Gobierno anunciará el fin del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), aunque la suspensión se demorará seis meses para que el Congreso busque una alternativa.
La cadena conservadora Fox ya anticipó la semana pasada el fin de DACA y el diario Politico fue el primero en informar este domingo de ese plazo de seis meses que prevé dar Trump al Congreso para negociar y aprobar una alternativa legislativa para los beneficiarios del programa.
Es posible que el anuncio se produzca hoy durante una rueda de prensa que tiene previsto ofrecer a las 11:00 hora local (15:00 GMT) el fiscal general, Jeff Sessions, uno de los miembros del Gobierno de Trump con posiciones más duras en inmigración y quien como senador por Alabama se posicionó varias veces en contra de DACA.
El programa DACA fue promulgado por una orden ejecutiva del entonces presidente Barack Obama en 2012 y gracias a él miles de jóvenes indocumentados han podido frenar su expulsión de Estados Unidos, obtener un permiso temporal de trabajo y, en algunos estados, un carné de conducir.
Tres cuartas partes de los beneficiarios del programa tienen nacionalidad mexicana, según los últimos datos del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS), publicados en marzo.
Durante la campaña electoral, Trump prometió que acabaría con DACA aunque posteriormente, ya desde la Casa Blanca, reconoció que ese era «uno de los temas más difíciles» a los que tenía que hacer frente durante su Presidencia y aseguró que lo encararía «con corazón», sin dar más detalles.
El mandatario ha recibido una gran presión para acabar con DACA por parte de fiscales generales de nueve estados conservadores, encabezados por Texas y que han amenazado con interponer hoy una demanda contra el Gobierno si no deroga el programa.
Vía: el nuevo diario