Revolucionó el consumo, creó una legión de seguidores y se convirtió en la compañía tecnológica más valiosa. Hoy Apple enfrenta el reto de mantener esa curva ascendente
Diez años puede sonar a poco, pero también a mucho. Y para Apple los últimos diez años han sido mucho, sobre todo si miramos la evolución de sus acciones, que se multiplicaron por diez y ya están pasando los US$160 la unidad.
Apple fue fundada por Steve Jobs y Steve Wozniak en 1976 y su primera oferta pública fue en diciembre de 1984, con un valor por acción inicial de US$3,59. Por aquel entonces el foco eran las computadoras compactas y su apuesta era la elegante Macintosh. Desde entonces Jobs apostó por el diseño y sus productos se caracterizaron por ser muy queridos a pesar de ser costosos.
La empresa caminaba a paso firme, con altibajos, pero siempre estaba detrás de IBM y Microsoft en términos de volúmenes colocados. Sus ventas no llegaban al potencial esperado y vivía buscando reinventarse, lo cual sucedió cuando Steve Jobs volvió a tomar el timón, luego de años de haber sido desterrado.
La revolución empezó con el iPad, que transformó la forma de oír música, pero se consolidó con la llegada del iPhone en enero del 2007. Para entonces las acciones estaban en US$ 13,22 la unidad. Diez años después estamos arriba de los US$160 y subiendo.
Hasta entonces los smartphone eran un producto típico de ejecutivos apegados al e-mail y el acceso al Internet móvil algo exclusivo de los adictos al trabajo.
El iPhone trajo una pantalla táctil que permitía interactuar en forma amigable y vino acompañada de una tienda de aplicaciones que te permitía descargar las aplicaciones que te provocara para optimizar el uso del equipo.
El resultado fue un nivel de amigabilidad y sencillez que transformó la forma en que se usaba el teléfono y marcó el rumbo que tomaría toda la industria.
APPLE VENDIÓ EL AÑO PASADO ALREDEDOR DE 211 MILLONES DE SMARTPHONE. EN EL 2014 VENDIÓ 169 MILLONES. CUANDO SALIÓ EL PRIMER IPHONE APENAS SE VENDIÓ POCO MÁS DE UN MILLÓN DE TELÉFONOS.
A medida que se iban presentando nuevas versiones, sus competidores chinos y coreanos empezaron una carrera por alcanzarlos que masificó el uso del smartphone y revolucionó el consumo.
En medio de esa carrera Apple fue elevando sus precios de venta y sus volúmenes de venta, lo cual se reflejaba en mejores ingresos. El teléfono se convirtió en el principal actor de su crecimiento.
Los años pasaban, las ventas se duplicaban y con ellas el precio de las acciones, que poco a poco pasaron los US$50 y luego superaron los US$100, en donde se han mantenido el último par de años. Ahora están arriba de US$160 gracias a la expectativa ante los nuevos modelos que están presentando, el iPhone 8 y el iPhone X, pero podrían haber llegado a su techo y caer considerablemente si los teléfonos decepcionan. En pocas horas lo sabremos.
Vía: El Comercio