Algunos tienen que faltar al trabajo para poder adquirir el producto
José Alejandro Ramírez J
Alejandroperiodista857@gmail.com
-Mis hijos empezaron clases, tengo que salir a comprar la comida, debo ir al trabajo, esto ya no es normal-, son algunas de las expresiones se escuchan en las distintas colas que se encuentran cerca de las estaciones de servicio de la ciudad donde llegan los choferes para llenar los tanques de sus carros con gasolina.
En cada estación de servicio se puede apreciar las caras de molestia por parte de las personas, otros como buen venezolano convierten todo en un chiste y de esta manera tratan de pasar el rato y no acordarse de que tienen hasta cuatro horas en una cola para adquirir combustible.
Farfán, una choferesa (quien no dio su nombre) comentó que su travesía comenzó el martes en horas de la tarde, cuando una amiga le dijo: “mira vete a la estación de servicio en la avenida España están echando y no hay casi personas”; la mujer comentó que salió como meteoro y con las luces en alta; pero cuando llegó lo que vio fue una fila kilométrica que parecía la caravana de unos recién graduandos.
Allí la mujer decidió retornar a su casa, pero pasó por la gasolinera, ubicada por la Fuente Luminosa y vio pocos carros; se persignó y se metió en la fila, en medio del calor y eso sí con una sonrisa por delante señaló que los últimos serían los primeros, pues al momento de llegar estaba cerca del Palacio de Justicia (si leyeron bien).
La cola empezó a formarse desde la estación de servicio, pasando por la calle del mercado de 5 de Julio, continuando por el Palacio de Justicia y pasando por la avenida Germania a la altura de un concesionario de ventas de vehículo; lo que se llama popularmente una vuelta a la manzana.
La fémina indicó no se sí otros tendrán la suerte de llenar sus tanques, pues las horas pasaban y las cola seguía en el lugar, pero fue enfática al mencionar que ella surtiría su tanque; ya que no podía volver a faltar al trabajo y menos dejar sus pequeños en casa con su abuela; pues tienen que incorporarse a sus estudios, ya que el año escolar arrancó el lunes (allí mencionó lo duro que ha sido comprarle los uniformes y los útiles, pero como dicen por allí, eso es otro cuento).
Otra persona comentó que no podía dar fe si esto era parte del bloqueo efectuado por USA, pero de lo que sí estaba clara es que cada vez le toca más duro al venezolano; “ya todos tienen una maestría en salir adelante y seguir guerreando”, dijo entre risas.
Por su parte, las autoridades comentaron que están haciendo todo lo posible para solventar el problema y devolver el suministro de manera normal a las estaciones de servicio.
Otros hacen su fiesta
Asimismo un grupo de personas por las redes sociales, denunciaron el supuesto incremento del pasaje por algunos choferes, quienes valiéndose de la actual situación habían incrementado el pasado entre 800 a mil bolívares e incluso acortaban las rutas.
Solo queda esperar que la situación vuelva a la normalidad y así las personas puedan retornar a sus rutinas diarias; ya que en los últimos días han tenido que hacer de todo para poder surtir los tanques de sus carros.
