Un incremento de alrededor 16% en los próximos 23 años, hasta el 2040, registrará la demanda mundial de crudo, de acuerdo a cálculos que la OPEP prevé en su último informe “Previsiones del Mundo Petrolero 2040”.
En el estudio presentado ayer en Viena, la Organización vaticinó que ese año los requerimientos globales de petróleo totalizarán “unos 111 millones de barriles diarios (mbd)”, y estima que será necesario invertir 10,5 billones de dólares en el sector para satisfacer dicho requerimiento, determinan.
El estudio proyecta además que en los próximos cinco años, hasta el 2022 aproximadamente, el crecimiento anual de la demanda de crudo se situará en una media de 1,2 millones de barriles al día.
“El cálculo implica que en el año 2022 el planeta consumirá 102,3 mbd ó 6,9 mbd más que en 2016, pero el crecimiento se ralentizará luego hasta quedar en unos 0,3 mbd por año entre 2035 y 2040 debido a las “estrategias energéticas” previstas para luchar contra el calentamiento de la Tierra”.
Este escenario, según plantean, no afectará la necesidad de que se produzca un ajuste al alza de la producción diaria de crudo, por parte de las naciones que integran esta Organización y sus aliados.
En este sentido, aprecian que las extracciones de los no OPEP subirán en 6,8 mbd, alcanzarán un pico de 63,8 mbd en 2027 y declinarán hasta 60,4 mbd hacia 2040, y que la OPEP aumentará la dependencia del crudo de sus catorce miembros: deberán bombear unos 7,7 mbd adicionales, entre 2020 y 2040 por lo que su participación en el mercado mundial se expandirá hasta el 37 %.