La liquidez monetaria se ubicó en 64,71 billones de bolívares al 10 de noviembre, con un crecimiento de 56,86 billones en comparación con la misma fecha del año anterior, reflejando un incremento de 753,54%.
El año pasado, la liquidez se ubicó en 7,85 billones de bolívares. Para contener la inflación, el Banco Central de Venezuela (BCV) aplica las subastas de mercado abierto que ha drenado 721 millardos de bolívares hasta el momento entre Operaciones Extraordinarias de Absorción y “Directo BCV”.
Sin embargo, estas operaciones resultan insuficientes para contener el crecimiento de la masa monetaria dado el incremento de la inflación que según la proyección de Torino Capital cerrará este año en 1.003% lo que deriva en la mayor utilización del signo monetario. A esto se le suma, que en este mes, se produce el pago de las utilidades y pensiones, lo cual implica mayor requerimiento de dinero circulante.
De acuerdo con el ente emisor al cierre del mes octubre, el componente de la liquidez monetaria, se repartió así: Dinero (monedas y billetes, depósitos a la vista, y depósitos de ahorro transferibles) con un monto de 53,2 billones de bolívares equivalentes 99,26% de la liquidez. El otro 0,74% (379,5 millardos) está representado por el cuasidinero.
Según la información difundida por el BCV, el billete de Bs 100 fue el que mayor circulación obtuvo con 640,9 millardos de bolívares, mientras que en el caso del nuevo cono monetario, el billete de Bs 10 mil alcanzó la circulación de 636,81 millardos de bolívares. Respecto al billete de Bs. 20 mil, esta alcanzó una circulación de 549,53 millardos de bolívares.
De acuerdo con especialistas del área, “las políticas del ente emisor no logran contener la inflación. Atribuyen al financiamiento directo a empresas del Estado a través del BCV, como uno de los factores que contribuye al crecimiento de la liquidez monetaria”.
Argumentan que “ese incremento por la vía de la monetización del déficit fiscal genera múltiples consecuencias, entre las que señalan importantes presiones inflacionarias difíciles de compensar sin un incremento equivalente en la productividad interna -o al menos en las importaciones- para el equilibrio entre la oferta y la demanda”.
Subastas de mercado abierto
En cuanto a las subastas, en lo que va del año 2017, por concepto de Operaciones Extraordinarias de Absorción se ha drenado 675 millardos de bolívares y por los Bonos “Directo BCV” 46 millardos de bolívares.
En este tiempo, se han efectuado 45 Operaciones de Absorción y 46 subastas del Directo BCV.
El ente emisor realiza estas operaciones con entidades del sistema financiero. Entre los meses de octubre y noviembre el ente emisor drenó 105 millardos de bolívares en Operaciones de Absorción y 9 millardos en Bonos directos BCV.
El Banco Central utiliza las subastas de mercado abierto, con la finalidad de esterilizar la liquidez excedente y controlar la inflación de manera progresiva. No obstante, “el problema que conlleva tales procesos se centra en que tienen un costo y su aplicación a largo plazo contribuye a agravar el problema que procura corregir”.
Entre otros, explican, “porque debe pagar un rendimiento por los recursos que capta al amparo de esa política y, cuando se produce el rescate de este, lo intereses pagados se suman a la liquidez excedente, ampliándola”. Por ende, este mecanismo a largo plazo conlleva al crecimiento de la liquidez.
La liquidez monetaria se puede establecer como el total de activos existentes en la economía que tienen la capacidad de convertirse en dinero efectivo rápidamente. En el país, está conformada por Monedas y Billetes y Depósitos a la Vista, más los Depósitos de Ahorro, A Plazo y Cuasidinero.