La leche materna es muy importante para el desarrollo del bebé, además de protegernos de enfermedades y alergias alimentarias.
En tres lustros, en nuestro país, las alergias alimentarias se han duplicado. Ahora, un nuevo estudio, publicado en el Journal of Experimental Medicine, es la primera investigación controlada que demuestra protección contra la alergia a los alimentos a partir de la leche materna, al tiempo que apunta a un mecanismo biológico para inducir la tolerancia a los alimentos. Básicamente, los resultados señalan que comer alimentos alergénicos durante el embarazo puede proteger a tu hijo de las alergias a los alimentos, especialmente si la madre le da el pecho al bebé.
En el estudio, realizado por expertos del Hospital de Niños de Boston y liderado por Michiko Oyoshi, un grupo de ratas preñadas que consumieron alimentos que provocan alergias, como los huevos y los cacahuetes, transfirieron anticuerpos protectores a sus crías a través de la leche materna. Los anticuerpos causaron que los ratones bebés produjeran células inmunitarias T reguladoras específicas de alérgenos, lo que les hizo tolerar los alimentos alergénicos.
Los hallazgos respaldan las recientes pautas de prevención de alergias, que rechazan los consejos previos que instan a las madres a evitar alimentos altamente alergénicos durante el embarazo o durante la lactancia.
“Si las madres deben comer alimentos alergénicos durante el embarazo o evitarlas ha sido algo controvertido – explica Oyoshi en un comunicado –. Diferentes estudios señalan distintos resultados, en parte porque es difícil en los estudios humanos saber cuándo las madres y los bebés consumieron por primera vez un alimento específico. En modelos de ratón, sin embargo, sí podemos controlar la exposición a los alimentos”.
El estudio mostró que la leche materna de las madres que consumían alimentos alergénicos, protegía contra la alergia a los alimentos, previniendo la anafilaxia, así como la producción de inmunoglobulina E y la expansión de los mastocitos, ambas características de una respuesta alérgica. La leche materna protegía incluso cuando se alimentaba a crías no relacionadas que no estaban expuestas a alérgenos alimentarios en el útero.
También se realizó una prueba en la que ratones con sistemas inmunes humanizados (adaptados para responder a anticuerpos humanos) eran alimentados con leche materna humana. Los resultados mostraron que también se veían efectos protectores, lo que sugiere que estos efectos pueden traducirse en bebés humanos.
Finalmente, el equipo de Oyoshi hizo que ratones nacidos de madres expuestas a alergenos, consumieran leche de madres que nunca habían consumido alimentos alergénicos. “Aquí también observamos efectos protectores – añade Oyoshi –. Pero la protección fue mejor cuando los ratones también estuvieron expuestos durante. Si combinamos la exposición en el útero y la lactancia, hay una inducción óptima de la tolerancia a los alimentos”.
El próximo paso es descubrir si estos mecanismos de protección se aplican en humanos. Para descubrirlo, Oyoshi han convocado a madres que actualmente están dando el pecho para comparar la leche y ver qué efectos produce en niños con antecedentes familiares de alergia.
Vía: Noticias24