Salida. Lo anunció Nikki Haley, embajadora de EEUU ante la ONU. Antes se había retirado del Acuerdo de París, de la TPP y la UNESCO. Y renegocia pacto nuclear con Irán y el TLCAN.
Donald Trump ha vuelto a dar un portazo a los acuerdos internacionales en problemas globales. Siguiendo a rajatabla su lema nacionalista ‘América primero’, el presidente de EEUU ha ordenado la retirada de su país del proyecto en marcha de la ONU para alcanzar en 2018 una orientación mundial consensuada en torno al fenómeno de los movimientos migratorios, que vive su fase más intensa desde la Segunda Guerra Mundial.
En la actualidad hay unos 65 millones de refugiados –en otros países o en otras zonas de sus propias naciones– expulsados de sus hogares por guerras, conflictos políticos o crisis humanitarias, a lo que se suma un flujo global de inmigrantes de alrededor de 245 millones de personas.
“Nuestras decisiones sobre políticas de inmigración serán tomadas por americanos y solo por americanos”, afirmó Nikki Haley, embajadora de EEUU ante la ONU. Pese a que el proyecto no alterará en absoluto las competencias nacionales, dijo: “No es compatible con la soberanía de EEUU”.
En septiembre del 2016, los 193 miembros de la Asamblea General de la ONU aprobaron la Declaración de Nueva York para refugiados y emigrantes. Sobre la base de esa Declaración, el Alto Comisionado para Refugiados recibió el mandato de proponer un Pacto Mundial sobre el tema en su informe a la Asamblea General en 2018. “El presidente Trump decidió detener la participación de EEUU en la preparación del pacto que apunta a obtener un consenso en la ONU en 2018”, señaló el comunicado.
“Las migraciones son un problema mundial que reclama una respuesta mundial”, replicó el presidente en ejercicio de la Asamblea General de la ONU, el eslovaco Miroslav Lajcak, quien deploró la decisión estadounidense. “El multilateralismo sigue siendo el mejor medio para enfrentar a los desafíos mundiales”.
El primer año de presidencia de Trump ha estado marcado por su distancia con acuerdos internacionales. Aún con el riesgo del aislamiento, EEUU se convirtió en el único país que no quiere formar parte del Acuerdo de París contra el calentamiento climático en el planeta. Se retiró de la UNESCO. También se retiró de la TPP. Y ahora renegocia el pacto nuclear con Irán, sus relaciones con Cuba o el TLCAN.
El retiro estadounidense del proyecto de Pacto Mundial sobre Migración ocurre cuando el Consejo de seguridad ONU multiplicó las reuniones sobre el tema migratorio.
Tras la crisis de emigrantes y refugiados que intentan llegar a Europa, el tema se agudizó con el éxodo masivo desde agosto de los rohinyás de Birmania hacia Bangladesh y con las informaciones sobre la existencia de mercados de esclavos en Libia.
Vía: La República
