A finales de 1960 se perpetró uno de los episodios de mayor manipulación psicológica contra el pueblo de Cuba. La maniobra fue coordinada por el gobierno de Estados Unidos, a través de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) con la colaboración de la iglesia católica. Se denominó la Operación Peter Pan.
Gracias a esa operación miles de niños cubanos fueron arrancados de su patria. Se utilizó para ello una guerra psicológica dirigida a padres sobre la supuesta eliminación de la patria potestad, para lo cual distribuyeron copias de una ley falsa en toda la isla.
Con el temor inoculado —pese a los esfuerzos que realizaba entonces la Revolución Cubana para consolidar la familia cubana, mediante la Ley de 797 del 20 de mayo de 1960— algunos padres terminaron enviando a sus hijos a Norteamérica, cuyo Gobierno se presentaba ante el mundo como el salvador, mientras que las corporaciones mediáticas hacía lo suyo: difundían supuestas historias de cubanos huyendo del «comunismo». Ocultaban la verdadera historia.
La realidad de los menores ya en Estados Unidos era totalmente diferente. Unos fueron enviados a campamentos, hogares sustitutos, orfelinatos y reformatorios. Los castigos corporales y el trabajo forzoso infantil era para varios de estos niños cubanos parte de su día a día, tras este viaje sin regreso.
La Operación Peter Pan —de acuerdo con material publicado en el portal La pupila insomne— se extendió a lo largo de 22 meses y finalizó teóricamente el 22 de octubre de 1962, día en el que el presidente estadounidense, John F. Kennedy, decretó el bloqueo naval a Cuba con el fin de crear las condiciones para invadir y bombardear a la isla.
Sin embargo, la «realidad se extendió hasta bien entrada la década de 1970, con nuevas variantes, como la de los vuelos de menores de edad a Madrid». Se estima que unos 14.000 niños cubanos fueron extraídos de esta forma de su país.
La reedición de la maniobra
Hoy, sectores en Venezuela pretenden reeditar esta operación, en medio de campañas mediáticas que pretenden falsear la realidad de la situación interna del país, que encara un bloqueo económico auspiciado por Estados Unidos.
El fiscal General de la República, Tarek William Saab, denunció este sábado a una supuesta Organización No Gubernamental (ONG) que trató de sacar del país 120 niños con permisos de viaje fraudulentos, y considero esta acción como inédita, «sin precedentes en nuestra historia republicana».
En ese sentido, se ordenó a diferentes fiscales indagar en esta situación irregular, así como investigar a la agrupación que organizó el viaje por su presunta vinculación con la trata de menores, debido a que de los 120 menores de edad, nueve contaban con permisos de viajes fraudulentos y dos autorizaciones eran falsa.
En la revisión de poderes que se notariaron «se detectó que 13 no fueron suscritos por el otorgante. Esto obliga a investigar los fines de la precitada ONG responsable de tan grave acción, pues testimonios de familiares revelan que los trámites se hicieron en sus oficinas privadas», advirtió el Fiscal General.
«La defensa y protección de los Derechos Humanos de niños, niñas y adolescentes en el mundo nunca jamás debe hacerse en base a la cobertura televisiva y mediática trasnacional para que los mismos sean presentados como trofeos de caza y menos como sujetos de un circo bufo», enfatizó.