Las protestas contra el coste de la vida en Irán continúan por sexto día consecutivo y ya se han cobrado la vida de al menos 20 personas según la televisión estatal iraní mientras que otras 300 han sido detenidas a pesar de los llamamientos a la calma del presidente iraní, Hasan Rohani, y de que se restringiera la actividad de las redes sociales.
Seis manifestantes murieron durante un ataque a una comisaría de policía en la ciudad de Qahdarijan. Intentaban robar armas del cuartel policial. Además, un chico de once años y otro de 20 murieron en Khomeinishahr. Por otra parte, un policía iraní murió este lunes en un tiroteo durante las manifestaciones de protesta en la ciudad iraní de Nayaf Abad, en la provincia de Isfahán -como las otras dos ciudades-, informó la agencia local de noticias Tasnim. Otros tres agentes resultaron heridos a causa de los disparos de uno de los manifestantes, según la misma fuente.
Estas son las manifestaciones antigubernamentales más grandes convocadas en Irán desde 2009, cuando el opositor “movimiento verde” organizó varias jornadas de protesta contra la reelección del entonces presidente, Mahmud Ahmadineyad, que fueron duramente reprimidas.
Rohani dijo este lunes que los enemigos de Irán azuzaron a ciertos grupos para promover incidentes porque no toleran los “éxitos” que Irán ha obtenido con el acuerdo nuclear suscrito en julio de 2015 con el G5+1 y en sus medidas contra el terrorismo en la región. El presidente iraní reitero el derecho del pueblo a criticar y protestar pero afirmó que “hay que elegir la manera y la vía legal para expresarse”. Asimismo el Parlamento iraní acusó a Israel, Estados Unidos y Arabia Saudí de fomentar los disturbios generados en las manifestaciones que se han producido.
Desde el sábado, tercer día de las protestas, el presidente estadounidense, Donald Trump, ha publicado varios mensajes en su cuenta de Twitter en los que ha criticado a las autoridades iraníes. Trump publicó este lunes que “el gran pueblo iraní ha sido reprimido durante muchos años. Están hambrientos de comida y libertad. Junto con los derechos humanos, la riqueza de Irán está siendo saqueada. ¡ES HORA DE UN CAMBIO!”, agregó.