«Por primera vez desde que juego en el Barcelona he sentido que el Real Madrid es superior». El que lo dijo fue Gerard Piqué y lo hizo tras ver cómo el equipo blanco pasaba por encima del azulgrana en el pasado mes de agosto. 5 meses después, el once de Zidane se encuentra a 16 puntos del Barcelona y lo que era una apisonadora se ha convertido en un maquina imperfecta y fácilmente vulnerable.
En la zona noble del Santiago Bernabéu llevan semanas buscando una explicación a lo que está sucediendo. No hay un único motivo, pero sí que se han detectado algunas de las pueden ser causas de un desplome sin precedentes y que lleva al Real Madrid a jugarse la temporada ante el PSG.
Los motivos del bajón blanco
1- Pérdida de solidaridad
Los jugadores, parte de ellos,han dejado de pensar en el grupo. Con las renovaciones en el bolsillo de la mayoría de ellos, el equipo ha quedado relegado a un segundo plano. En Vigo se vieron sobre el césped gestos y miradas de censura de unos a otros ante las elecciones de unos y los fallos de otros, con Cristiano Ronaldo como eje de estos gestos que no llevan a nada bueno dentro de cualquier equipo.
Desde el club están insistiendo en la necesidad de recuperar el espíritu de equipo, algo que se ha perdido y que consideran indispensable para poder saldar con éxito la eliminatoria ante el PSG y posteriores. Piensan que ha sido clave en los éxitos recientes y así se lo han hecho ver a los jugadores. Sin juego de equipo, no hay éxitos colectivos y menos aún individuales.
2- Falta de acierto cara al gol
En la pasada temporada, tras 17 partidos jugados por el Real Madrid (esos son los que lleva ahora) el equipo de Zidane sumaba 40 puntos, con 47 goles a favor y 18 en contra, por los 32 puntos de esta campaña y los 32 goles a favor y los 16 en contra. Por tanto, el equipo blanco ha perdido efectividad y acierto.
En verano, con motivo de las Supercopa, tanto la de Europa como la de España, al Real Madrid le hacía falta media ocasión para marcar, tal y como quedó claro con los dos títulos conquistados ante Manchester United y Barcelona, este último tras recibir 5 goles de los madridistas. En este aspecto, destacan los 2 goles de Benzema.
3- Bajón físico
Llama la atención que el rendimiento físico no es el esperado. Ni se aproxima a ello. Hay jugadores, al menos así piensan desde el club, que están lejos de su mejor forma, bien por culpa de las lesiones que han sufrido, bien porque no han alcanzado el nivel mínimo exigido o porque piensan en el Mundial y se reservan para el tramo final de la temporada
El método Pintus no está funcionando y se esperaba una respuesta inmediata al comenzar 2018, pero por el momento no hay rastro de ello. Las lesiones están siendo una lacra de difícil convivencia para los objetivos de la entidad y que, en ningún momento, pasaban por estar sin opciones en la Liga con 21 partidos por delante.
4- Diferente distribución de minutos en verano y ahora
La Supercopa de España, termómetro que sirvió para decir que el Real Madrid había pasado por encima del Barcelona, llegó de la mano de reparto de minutos y con mucha presencia de jugadores como Asensio o Lucas Vázquez, fundamentales especialmente en el partido de vuelta disputado en el Bernabéu. En el Clásico ambos desaparecieron, aunque Asensio tuviera 15 minutos con todo en contra. Otro jugador que fue decisivo fue Kovacic, gran damnificado del choque liguero.
5- Falta de ambición y confusión alrededor de la portería
La tripa está llena y ya no se pelea con la fe y la confianza en Zidane de antes. Algunos se creen que tienen el puesto asegurado en los partidos clave y eso lleva a bajar los brazos antes de tiempo. Otros, sin embargo, han dado un paso atrás al creerse intocables sin serlo. Los títulos y los éxitos confunden y ha faltado una voz que lo recuerde.
Todo lo hablado sobre el futuro de la portería ha descolocado a más de uno, aunque es cierto que Keylor Navas está siendo de los más aprovechable de las últimas semanas, pero sí que es cierto que todo lo dicho con Kepa ha desviado la atención al grupo por su especial relación con el portero de Costa Rica.