Las cualidades de las regulaciones chinas han hecho posible que se inicie con la modificación de los genes de al menos 86 personas.
En el mundo occidental durante años ha existido un acalorado debate sobre los límites éticos de la manipulación genética entre humanos. Pero al parecer en Asia piensan muy distinto y ya van adelantados en la labor.
Al menos eso afirma un incendiario artículo del Wall Street Journal, en donde reportan que al menos 86 individuos en China han editado ya su código genético con la finalidad de ayudarles a curar enfermedades.
La técnica de edición de genoma CRISPR (Clustered Regularly Interspaced Short Palindromic Repeats) ya ha sido utilizada en ocasiones anteriores, tanto dentro como fuera de China.
Pero esta sería la primera ocasión en donde un grupo tan significativo de personas se han visto sometidas a este procedimiento.
Ya que según afirma el diario le técnica CRISPR se ha utilizado en hospitales chinos para tratar enfermedades humanas como el cáncer desde 2015. Para acumular ya a un total de 86 pacientes que han recibido dichos tratamientos, basados en la alteración de sus propios genes.
El factor clave para haber logrado esta cantidad de sujetos de prueba serían los propios códigos de regulación interna del sector Salud en China; donde los propios comités internos de los hospitales pueden autorizar en menos de 24 horas la aplicación de estos tratamientos.
Aún así, queda en el aire la situación de los posibles efectos secundarios, o las reacciones inmunes detonadas por un tratamiento que aún se considera como experimental.
Como si fuese película de ciencia ficción.
Vía: fayerwayer