La nueva contratación colectiva petrolera 2017-2019 vencida desde octubre y firmada el pasado mes de abril viola sus propias clausulas al negar la remuneración del retroactivo por concepto de tarjeta electrónica de alimentación (TEA), así lo dijo Ernesto González, jubilado de Pdvsa y afectado tras esta decisión.
Continuó denunciando que fueron excluidos del aumento salarial los trabajadores jubilados, hecho que a su juicio causó gran impactó en los extrabajadores, puesto que por primera vez firman contra sus propios beneficios, en perjuicio de la mayor masa de trabajadores activos y pasivos del país.
Los intereses del fondo de pensiones desaparecieron y nadie responde por parte de Pdvsa, es por ello que solicitan respuestas por parte del ministro de Energía y Petróleo Manuel Quevedo, el presidente de la federación petrolera, Will Rangel y el generante general de recursos humanos de Pdvsa Robert Pérez, por ser en su opinión los responsables de esta decisión. RR