Fue detenido por averiguaciones
Leidimar Morao desmintió que su hermano fue detenido con arma de fuego cuando desvalijaban un vehículo
Redacción
Leidimar Morao alza su voz para pedir justicia y que se realice una investigación para conocer el verdadero hecho que llevo a la muerte a su hermano Luis Carlos Morao de 18 años en los calabozos del En el estado Falcón, funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) de Ciudad Bolívar el pasado 16 de octubre.
“Estoy en representación de mi familia para declarar la injusticia que se llevó a cabo en contra de mi hermano, quien fue detenido el lunes 15 en José Antonio Páez, en donde funcionarios del Cicpc llegaron y arremetieron contra los muchachos”.
Recordó que fueron 11 los detenidos en ese momento, y ella al notar lo ocurrido se acercó para intervenir por su hermano Luis Carlos Morao.
“Al ir hasta donde estaban los funcionarios me explicaron en un primer momento que ellos serán chequeados, pero por detalles de señal que no había tendrían que ser trasladados hasta el Cicpc de Ciudad Bolívar para cumplir con el requisito, yo le pregunté que si podíamos ir hasta allá, en donde tuvimos una respuesta positiva, llegamos a la media hora junto los familiares de los demás detenidos preguntando por ellos”.
Leidimar Morao señaló que desde un primer momento que llegaron le informaban que no es encontraba en la sede, hasta que al pasar los minutos pudo ver cuando era trasladado de un sitio a otro.
“Había pasado media hora cuando llegamos, y me decían que no estaba pero yo ya lo había visto, hasta que por fin me indican a las 7:00 pm que están bajo averiguaciones, y no fue hasta las 11:00 de la noche que salió otro funcionario de mayor rango indicándonos que estaban allí por averiguaciones de hurto de vehículo, y desvalijamiento de vehículo” declaró.
Para su sorpresa luego sale reseñado en algunos medios que su hermano; quien estaba recién cumplido los 18 años, recién graduado, con planes para estudiar en la universidad, y quien no tenía antecedentes penales, lo daban como un delincuente que portaba arma de fuego además de que estaba desvalijando un vehículo.
“Venimos a desmentir eso que se dijo en los medios, a él lo conocían en la comunidad y sabían que no andaba en malos pasos y nos están apoyando”.
Además Morao dijo que ese mismo día de la detención fueron liberados 3 personas, quedando aún 8 sin libertad, por lo que la duda le era mayor.
“Queremos denunciar la forma del proceder de los funcionarios que llegan de manera arbitraria y amenazante, son personas que no respetan y abusan de su poder”.
Pide investigar el hecho
Leidimar Morao relató con suma tristeza que pude ver a Luis Carlos el lunes 15 a las 11 de la noche pudiendo dar fe que estaba con vida y en perfectas condiciones, lo que motivó con lo comentado por funcionarios del Cicpc a buscar al siguiente día la ayuda legal.
“El día 16 nosotros fuimos a buscar un abogado, estuvimos en la Fiscalía para hablar con Nayleth Romero y allí en una llamada telefónica le informan desde Cicpc que mi hermano murió de un infarto”.
Relató que al llegar al sitio los funcionarios dieron muchas versiones de la muerte; “nos dijeron que el extractor del calabozo donde se encontraba mi hermano se apagó y sufrió una asfixia mecánica, otra versión es que hubo una fuga de un extintor y eso hizo que a él le diera un infarto, y la otra versión fue de una riña entre los detenidos y que murió a golpes”.
La entrega del acta de defunción señalaba muerte por una hemorragia cerebral, además que no presentaba golpes en su cuerpo ni evidencia de maltrato, autopsia que explicado por Morao se realizó con representantes de Derechos Humanos, y demás cuerpos, pero sin el acompañamiento de familiares.
“Cuando nos entregan el cuerpo para el entierro notamos que tenía lesiones en sus tobillos con quemadura y falta la piel, tenia golpes en la cabeza, sus genitales morados, las piernas con rapones, su brazo izquierdo con raspones, la camisa que llevaba estaba mojada, olía a tierra, orine, nosotros hicimos fotos de todo ello” puntualizó.
Pide que se haga justicia por su muerte, así como desmentir públicamente que Luis Carlos Morao no era un delincuente.