La Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela (Fedecámaras), en representación del sector empresarial del país, rechaza las acciones violentas por parte de Nicolás Maduro y las Fuerzas Armadas, en su empeño de evitar a cualquier costo el ingreso de la ayuda humanitaria a nuestro país.
Condenamos y lamentamos la actuación de las Fuerzas Armadas de Venezuela y de grupos de civiles armados que al cierre de este 23 de febrero ya daban como resultado una represión desproporcionada contra las comunidades indígenas en Santa Elena de Uairén, al sur del estado Bolívar, dejando cuatro personas fallecidas y decenas de heridos, mientras que en la frontera con Colombia también se registraron centenares de heridos, dos gandolas incendiadas con un cargamento importante y necesario para la población venezolana de medicamentos y alimentos, y agresiones físicas a varios equipos de periodistas tanto nacionales como internacionales.
El llamado es a los factores políticos y militares a la sensatez y a la humanidad, Venezuela, sus ciudadanos, necesitan hoy más que nunca esta primera ayuda humanitaria hasta que logremos avanzar en la recuperación de la producción nacional, en un país donde la democracia y un verdadero Estado de derecho sean base del desarrollo productivo que tanto necesitamos.
El gremio empresarial reitera la necesidad de un cambio político que deje de hostigar a las fuerzas productivas del país, que respete el derecho a la vida, a la propiedad privada y que entienda la importancia de insertar a Venezuela en una dinámica de desarrollo sostenible que hoy viven países hermanos y vecinos, lo que permitirá generar la confianza necesaria para la recuperación económica que garantice un país de progreso y bienestar.
