Agosto significa para los bolivarenses, el inicio de la tradicional pesca de la sapoara. Este exquisito pescado solo es capturado con atarrayas a manos de pescadores en curiaras o desde las plataformas que están colocadas al borde del malecón del paseo Orinoco.
La pesca de este animal es considera como una actividad vinculada estrechamente a la identidad bolivarense por ser una especie privilegiada del río Orinoco.
Para Starling Aular, hablar de agosto, es hablar de sapoara.
Cada año los bolivarenses entonan la melodía de Serenata Guayanesa: “Llegando a Ciudad Bolívar”, canción que refleja la creencia popular de que quien comiera la cabeza de la sapoara se casaba con una guayanesa y se quedaba a vivir en Ciudad Bolívar y para Aular “no hay que dejar de entonar esta canción que pertenece a nuestro folclore en esta fecha”.
Hay diversidad de opiniones que dicen que la sapoara solo aparece cuando el río Orinoco comienza a cabecear; o aparece cuando el Orinoco crece. “Ya está cabeceando el río y aún no se ha visto ninguna sapoara pero ánimo Ciudad Bolívar aún estamos esperando la tan deseada y exquisita Sapoara”, dijo Aular. Redacción/ Con información Starling Aular