Un estudio presentado este viernes por la estadounidense Universidad de Duke, demostró que las personas que, a los 45 años, caminan más despacio pueden tener su cerebro más envejecido y además lucir más viejos.
La investigación del centro educativo midió 19 factores en personas de esa edad y concluyó que el caminar más rápido está relacionado con mejores resultados de las funciones cerebrales.
«Lo que es realmente sorprendente es que esto se da en personas de 45 años de edad, no en pacientes geriátricos a los que usualmente se les evalúa con estas medidas», anotó Line Rasmussen, investigadora de posdoctorado en el Departamento de Psicología y Neurociencia de Duke.
Rasmussen y otros científicos analizaron la información de cerca de 1.000 personas desde la edad preescolar hasta que recientemente cumplieron 45 años, indica el reporte que se publicó a la fecha en Jama Network Open.
«Los doctores saben que las personas que caminan más despacio en sus setentas u ochentas tienden a morir más pronto que quienes caminan más rápido a esas edades», anotó Terrie Moffitt, profesora de psicología de Duke y de desarrollo social en King’s College London.
EFE