El partido marxista Perú Libre, que llevó a Pedro Castillo a la Presidencia de Perú, anunció que no le dará el voto de confianza a su nuevo gabinete al considerar que este supone un giro al «centro derechismo», lo que supone un alejamiento claro del Ejecutivo y anticipa una ruptura del bloque político.
En un comunicado difundido por el líder del partido, Vladimir Cerrón, Perú Libre señala que «existe un inocultable giro político del gobierno y su gabinete hacia el centro derechismo, donde incrementaron los representantes ‘caviares», como califican de forma despectiva a los políticos de izquierda progresista.
«Esta composición la integran partidos sin inscripción, sostenidos por ONG norteamericanas, quienes han cogobernado con los cuatro últimos gobiernos y ahora con el actual», indicó el comunicado firmado por la Asamblea Nacional Extraordinaria del partido.
Perú Libre enfiló sus críticas también contra la designación de las ministras de Trabajo, Betsy Chávez, y de Desarrollo e Inclusión Social, Dina Boluarte, vicepresidenta de la República, ambas militantes del partido, sobre las que señala que no representan al grupo político porque sus nombramientos responden a actos «individualistas».
Asimismo, planteó a los congresistas que son militantes de Perú Libre a recomponer su bancada en el Parlamento, pues agregó que los legisladores afines al magisterio, el sindicato al que pertenece Castillo, «tienen un proyecto de partido propio».
Presidente alista su partido
Efectivamente, la Federación Nacional de Trabajadores en la Educación del Perú (Fenate Perú), sindicato fundado por Castillo, recibió su inscripción oficial ante el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo en julio pasado, a escasos días de la asunción del mandatario, lo que significaría un primer paso para su transformación en movimiento político.
Entre los 37 congresistas que tiene Perú Libre, un grupo de unos 13 legisladores está formado por maestros cuyos vínculos son más estrechos con Castillo que con Cerrón, y desde hace ya semanas se habla de que conformarán un grupo parlamentario independiente.
Perú Libre invocó a sus legisladores a dar cumplimiento a lo dispuesto y no dar el voto de confianza al gabinete «caviar» presidido por la abogada Mirtha Vásquez porque «no hacerlo implicaría una incoherencia principista»
Cuestionamientos mezquinos
«Es cierto que la política sirve para llegar a entender a la población, pero todos los días no podemos estar en problemas o en cuestionamientos o respondiendo a situaciones mezquinas porque el Perú nos ha elegido para trabajar y gobernar de cara al pueblo y sin robar un centavo, sin robarle a nadie», expresó al mandatario peruano ante esta declaración.
Con los últimos cambios en el gabinete, Castillo removió a los militantes y colaboradores más cercanos de Cerrón de su gabinete, como el ex primer ministro Guido Bellido, investigado por presunta apología al terrorismo y quien encabezó el enfrentamiento con la oposición en el Parlamento.
Castillo descartó un acercamiento con sectores de centro o de derecha, y en su lugar dijo que «acá manda el pueblo y el dinero tiene que ser invertido para ellos».
Enfrentamiento desde las redes
El jefe de Estado también le lanzó una crítica a Cerrón al afirmar que «hoy hasta con un tuit se piensa que se cambia el país, y así no es, el país se cambia trabajando».
En el mismo sentido, el ministro de Salud, Hernando Cevallos, comentó que «hay una distancia entre tener diferencia y pasar francamente a la oposición de un gobierno que sigue levantando las banderas que propuso en la campaña».
Cevallos afirmó que el perfil de Vásquez «es más dialogante», lo cual le parece bueno. «Hay un grado de tolerancia mayor, en la necesidad de buscar consensos», añadió.
«Tenemos un gabinete que está planteando un debate intenso de las cosas para llegar a conclusiones serias. Ese es el perfil que tiene Mirtha Vásquez», declaró el titular de Salud, que fue ratificado en su puesto tras la remoción de Bellido.
El Nacional