Los enfrentamientos entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y los grupos disidentes de las FARC se sienten por gran parte de la frontera entre Colombia y Venezuela, lo que deja centenares de desplazados y desaparecidos en el camino.
Esta ciudad está a más de 370 kilómetros de Saravena, Arauca, Tame y Fortul, donde a principios de enero el ELN comenzó una ofensiva de asesinatos selectivos contra miembros o aliados del Frente Décimo y 28 de las disidencias.
Lo cual, a su vez, supone una ola de violencia de retaliación, incluida la declaratoria de guerra por parte de estos frentes, que dicen estar a las órdenes de unas FARC nacionales.
Hasta la fecha, a esta pequeña ciudad de menos de 20.000 habitantes se trasladaron 936 personas de 277 familias, según la Defensoría del Pueblo de Colombia.
El organismo corroboró que 55% de estos desplazados son indígenas migrantes, el 42% venezolanos y 3 % campesinos o pescadores colombianos.
«Ahí donde nosotros estábamos mataron a un pocotón de gente, como unos 12», aseguró uno de los campesinos, que pidió quedar en el anonimato por miedo a que vayan a buscarle.
En Arauca (frontera con Apure) la tensión entre el ELN y los frente Décimo y Veintiocho de las extintas FARC ha escalado brutalmente desde el comienzo del año. Ya hay al menos 34 muertos, aunque organizaciones sociales hablan de 40.
En ese departamento, el ELN y las antiguas FARC ya se enfrentaron en una «guerra de guerrillas» entre 2005 y 2011. Esto dejó medio millar de civiles muertos y una gran cantidad de bajas en las filas de ambos grupos.
De ahí salió un acuerdo, una especie de «manual de convivencia», donde aceptaron respetar sus territorios y no enfrentarse entre ellos, que se siguió respetando tras la desmovilización de las FARC.
Sin embargo en los últimos meses estos dos frentes, que se cree que están coordinados por las disidencias nacionales de alias «Gentil Duarte», han crecido en tamaño y amenazado la hegemonía que tiene el ELN en esta parte del país y en el lado venezolano, donde se calcula que están entre 60 y 70% de sus efectivos.
El Nacional
