El tomate es un alimento muy frecuente en la despensa del hogar. Es un ingrediente común para la preparación de distintos platos de comida y ensaladas. El tomate es un alimento versátil que se puede consumir cocido o en su estado original. Es una opción saludable para incluir en la alimentación diaria, pues tiene efectos positivos para el organismo.
La Vanguardia menciona el contenido nutricional de este alimento:
Calorías 22
Proteínas 1g
Grasas totales 0,11
Hidratos de carbono 3,5
Fibra (g) 1,4
Agua (g) 94
Calcio (mg) 11
Hierro (mg) 0,6
Magnesio (mg) 10
Zinc (mg) 0,22
Sodio (mg) 3
Potasio (mg) 290
Fósforo (mg) 27
Vitamina B6 (mg) 0,11
Vitamina C (mg) 26
Vitamina E (mg) 1,2
El tomate aporta diversos beneficios para el cuerpo humano. “Esta fruta posee propiedades diuréticas, antiinflamatorias y antioxidantes, con muchos beneficios para la salud, que ayuda a prevenir enfermedades, como cáncer de próstata, infarto de miocardio y osteoporosis”, explica el portal especializado en salud Tua Saúde.
Otros de los beneficios del tomate incluyen:
- Protección de la visión.
- Fortalecer y dar brillo al cabello.
- Ayudar a regular la presión arterial.
- Fortalecer el sistema inmunitario.
Sobre esa misma línea, este sitio web especializado indica los beneficios de este alimento para la salud del corazón. Gracias a su contenido alto de antioxidantes contribuye a que los vasos sanguíneos estén saludables y a disminuir los niveles de colesterol malo(LDL).
Dieta saludable para el corazón
Una alimentación saludable es fundamental para la salud integral del organismo. Los expertos de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, recomienda el consumo de frutas y verduras, debido a que son fuentes de vitaminas y minerales. Asimismo, son una opción muy saludable, ya que tienen pocas calorías y son ricas en fibra dietética.
Esta entidad de salud recomienda “Incluir verduras y frutas en tu dieta puede ser fácil. Conserva verduras lavadas y cortadas en tu refrigerador como colaciones rápidas. Mantén frutas en un tazón en la cocina para acordarte de comerlas. Elige recetas que tengan verduras o frutas como ingredientes principales, como verduras salteadas o frutas frescas mezcladas en ensaladas”.
Respecto a las grasas, aconseja cuáles deben elegirse y cuáles debe moderarse su consumo. Cabe resaltar que si se desea una asesoría profesional sobre alimentación, se debe consultar con un nutricionista.
Las grasas que se deben elegir:
- Aceite de oliva
- Aceite de canola
- Aceite vegetal y de nuez
- Margarina, sin grasas trans
- Margarina que reduce el colesterol, como Benecol, Promise Activ o Smart Balance
- Frutos secos, semillas
- Palta (aguacate)
Las grasas que se deben reducir su consumo:
- Mantequilla
- Manteca
- Grasa de tocino
- Salsa espesa
- Salsa de crema de leche
- Sustituto de crema de leche sin lácteos
- Margarina y grasa hidrogenadas
- Manteca de cacao, que se encuentra en el chocolate
- Aceites de coco, de palma, de algodón y de palmiste.
Importancia de mantenerse hidratado
El agua es importante para la salud cardiovascular del ser humano. Así lo explica la Fundación Española del Corazón: “Si bebemos menos agua de la que nuestro organismo necesita, pueden comenzar a fallar algunas funciones del organismo y que se vea comprometida nuestra salud cardiovascular. Ocurre, por ejemplo, cuando la deshidratación lleva a una mala función renal y esta provoca la aparición de arritmias”.
Mantenerse hidratado disminuye el riesgo de desarrollar problemas del corazón. Sobre esa misma línea, Sanitas señala los diferentes beneficios que tiene este líquido para el organismo:
- Alivia la fatiga.
- Evita el dolor de cabeza y las migrañas.
- Regula la temperatura del cuerpo.
- Reduce el riesgo de cáncer.
- Mejora el sistema inmunológico.
- Resuelve el mal aliento.
- Ayuda a perder peso.