La producción petrolera de Venezuela aumentó en 51.000 barriles por día (bpd) en octubre, con lo que llegó a 717.000 bpd, un 7,6 % más que los 666.000 de septiembre, según el informe de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) difundido ayer.
Con estos datos, Venezuela sigue lejos de la meta fijada por el presidente Nicolás Maduro de producir 2 millones de bpd a finales de 2022, para lo que necesita incrementar su bombeo de crudo en 178 % en menos de dos meses.
El país llegó a producir 3,2 millones de bpd en 1997, cuando el chavismo todavía no había llegado al poder, y los 20 años siguientes se mantuvo por encima de los 2 millones.
Pero la industria petrolera venezolana, luego de haber sido una de las más fuertes del mundo, se vino abajo, sobre todo en el último lustro, a causa de la falta de inversión, la reducción del recurso humano calificado, la gestión, la corrupción y, más recientemente, las sanciones impuestas por Estados Unidos, según especialistas del sector.
El pasado octubre, el presidente de EE.UU., Joe Biden, dijo que Venezuela tiene que hacer “mucho” para que el país norteamericano alivie las sanciones contra el Gobierno de Maduro, que propuso el mes pasado a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) que estudie “el impacto de las medidas coercitivas unilaterales” que pesan sobre la nación.