La Universidad de Washington en San Luis, Estados Unidos, publicó este viernes una investigación en la revista científica Nature donde asevera que 400 millones de personas a nivel mundial han padecido lo que nombran Covid-19 prolongado.
«El Covid prolongado afecta drásticamente el bienestar y el sentido de sí mismo de los pacientes, así como su capacidad para trabajar, socializar, cuidar a otros, gestionar las tareas domésticas y participar en actividades comunitarias, lo que también afecta a las familias de los pacientes, a los cuidadores y a sus comunidades», apunta la investigación.
Este estudio sustenta sus argumentos en el análisis de «decenas de estudios y métricas correspondientes al 2023».
Ello le permitió al equipo de investigadores demostrar que «aproximadamente el seis por ciento de los adultos y cerca del uno por ciento (alrededor de 400 millones de personas) de los niños habían padecido Covid-19 prolongado» desde el incio de la enfemedad.
De igual modo, la investigación aclara que se tuvo en cuenta que los casos que fueron registrados entre 2022 y 2023 se desaceleraron tras la aplicación de vacunas, acotando además que la variante Ómicron es mucho menos agresiva.
«Casi el 10 por ciento de las personas tienen menos posibilidades de empleo tras padecer el virus«
Asimismo, los investigadores apuntan que el número estimado podría ser superior al publicado, esto debido a que los pacientes que sirvieron de muestra fueron solo los que padecieron la enfermedad en el período infeccioso del virus y no los que presentaron la patología más de una vez.
Entretanto, el informe detalla que «casi el 10 por ciento de las personas con esta enfermedad tiene menos probabilidades de estar empleadas que quienes nunca se contagiaron».
Además, se expone que solo el siete y 10 por ciento de las personas que padecieron el virus «se recuperaron por completo dos años después de desarrollar la enfermedad», añadiendo que no hay argumentos desde la ciencia que expliquen ello, aunque algunas observaciónes indican que «fragmentos del virus permanecen en el organismo».
Por último, los investigadores admiten que aún existe desconocimiento de la enfermedad y que prevalece una «ausencia casi total de evidencia, de ensayos clínicos aleatorios que oriente las decisiones de tratamiento».
«El Covid prolongado probablemente represente una enfermedad con muchos subtipos, cada uno puede tener sus propios factores de riesgo, mecanismos biológicos y trayectoria de la enfermedad, y puede responder de manera diferente a los tratamientos», concluye el texto.
Con información de Telesur.
