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jueves, octubre 3, 2024

UEE Antonio Ricaurte comienza el año escolar con carencias en infraestructura

Los estudiantes de la Unidad Educativa Estadal Antonio Ricaurte enfrentaron un difícil inicio de año escolar debido a la deplorable condición de la infraestructura de su escuela, la cual lleva más de una década sin recibir mantenimiento gubernamental.

La escuela, que incluye diez aulas, la dirección, la cocina, el Centro de Recursos para el Aprendizaje (CRPA) y el maternal, presenta un deterioro significativo. Los techos de platabanda y machihembrado se filtran con la lluvia, impidiendo el desarrollo normal de las clases. Ventanas rotas, baños en mal estado y mobiliario en desuso son parte del panorama diario. Algunos padres han tenido que reparar los muebles por cuenta propia.

Elvira Gutiérrez, madre de tres niños, hizo un llamado a las autoridades: “Queremos pedir apoyo porque la escuela necesita muchos recursos. No hay agua potable y los techos se mojan. A veces no podemos colaborar debido a la situación del país”.

Rosangel Salazar, otra representante, también pidió ayuda al presidente Nicolás Maduro y al alcalde local: “Cuando llueve, es horrible. Necesitamos apoyo para todo el plantel, para que nuestros hijos tengan una educación de calidad”.

La falta de agua potable es otro problema grave. La escuela depende de camiones cisterna para abastecerse, lo que dificulta el cumplimiento del horario escolar. Enzo Rodríguez, estudiante de sexto grado, hizo un llamado al ministro de educación Héctor Rodríguez: “El techo se moja y algunas maderas casi caen sobre los niños. Necesitamos su colaboración para mejorar la escuela”.

El parque, única área de recreación, está inhabilitado, y los 235 estudiantes esperan ver recuperada su escuela para disfrutar de una mejor educación en un ambiente adecuado.

A pesar de las adversidades, los padres y representantes valoran el esfuerzo de los docentes, quienes decoraron la escuela con sus propios recursos para dar una bienvenida cálida a los estudiantes. Yanitza Medina, exdocente y residente del sector, expresó su preocupación por la seguridad de los niños y pidió al gobernador y al ministro de educación que atiendan urgentemente las necesidades de la escuela.

Yanitza Martínez

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