Los versos satánicos de Salman Rushdie, el Libro Rojo de Mao o El príncipe de Maquiavelo: todos ellos son libros que han sido considerados peligrosos a lo largo de la historia, pero ¿se sabe cuál fue el más letal de todos ellos?
A lo largo de la historia, han sido muchos los libros que se han estimados peligrosos. Unas veces por su capacidad para incitar a la violencia, otras por propagar ideologías consideradas perniciosas o por suponer una amenaza contra el orden sociopolítico, estos escritos se han visto prohibidos, quemados o relegados a circular en la clandestinidad.
El concepto de “libro peligroso” depende directamente de los principios de la persona, poder o institución que evalúe la cuestión. Así, la novela antiesclavista La cabaña del tío Tom, de Harriet Beecher Stowe (1852), fue prohibida por los estados del sur de los Estados Unidos. Con una economía basada en la explotación esclavista, temían que el impacto de esta novela en el movimiento abolicionista acabase por poner en jaque (como, efectivamente, acabó sucediendo) su forma de vida.
Incluso los libros sagrados sobre los que se sustentan las principales religiones monoteístas contemporáneas, como la Biblia y el Corán, tienen detractores que los perciben como incitadores de desmanes en nombre de la fe. Se estima que, cada año, se distribuyen unos 20 millones de ejemplares del Corán y entre 80 y 100 millones de Biblias en todo el mundo.
Algunos de los libros más peligrosos de la historia
A continuación, te hablamos de algunos de los libros más peligrosos de la historia. En cualquier caso, lo que la historia demuestra es que los libros, por sí mismos, no son peligrosos. Solo lo devienen cuando se utilizan para justificar masacres, conflictos armados o dictaduras.
‘Mein Kampf’ de Adolf Hitler (1925-1926)
Mi lucha o Mein Kampf, de Adolf Hitler, se cita con frecuencia como uno de los libros más dañinos de la historia contemporánea. Escrito durante el encarcelamiento que siguió a su fallido golpe de estado de 1923, este libro expone los principios ideológicos racistas de Hitler, su marcado antisemitismo, que se basa en la existencia de una conspiración judía para dominar el mundo, y su visión para fundar el nuevo Reich germano.
El libro desempeñó un papel importante en la propagación de la ideología nazi entre la población, que culminaría en la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto. Historiadores como el reputado Ian Kershaw han destacado que las ideas vertidas por Adolf Hitler en Mi lucha iban más allá de la mera retórica populista. Según el estudioso, el volumen alimentó las políticas genocidas aplicadas con terrible eficiencia por los nazis. Hoy en día, el libro sigue siendo regulado en varios países por su capacidad para incitar al extremismo y la violencia.
‘Los protocolos de los sabios de Sión’ (1903)
Se trata de un documento fraudulento originado en la Rusia zarista para justificar los pogromos. Este texto documenta una supuesta conspiración judía para dominar el mundo y, aunque su veracidad se ha desmentido repetidamente, sigue siendo un texto de propaganda (o antipropaganda) muy peligroso que alimenta las teorías de conspiración. Los Protocolos se convirtieron en un texto clave utilizado por los los movimientos antisemitas en todo el mundo, incluidos los nazis, para justificar la persecución de los judíos.
‘El origen de las especies’ de Charles Darwin (1859)
A priori, no parece que la obra científica clave de Charles Darwin pudiese acarrear peligro alguno. Sin embargo, su publicación en plena época victoriana avivó los intensos debates sobre la ciencia, la religión y el papel del ser humano en el planeta. La teoría de la evolución propuesta por Darwin desafiaba la narración bíblica de la creación divina y le robaba protagonismo al género humano, convertido ahora en un animal más. Esta nueva teoría científica provocó que el libro se prohibiese en varios países, la España franquista entre ellos.
Además, entre finales del siglo XIX y principios del XX, las ideas de Charles Darwin se utilizaron para justificar la aplicación de la eugenesia y el darwinismo social. Estas corrientes de pensamiento argumentaban la superioridad de ciertas razas sobre otras, lo que sirvió de pretexto para aplicar políticas sociales y médico-sanitarias devastadoras, incluidas las esterilizaciones forzadas y los genocidios sistemáticos.
‘El manifiesto comunista’: el libro más peligroso
El Manifiesto Comunista (1848), de Karl Marx y Friedrich Engels, sentó las bases de los movimientos socialistas y comunistas contemporáneos. Su llamada a la lucha de clases y la voluntad de derrocar a las sociedades capitalistas lo ha convertido en un libro considerado peligroso por muchos gobiernos de matriz capitalista.
Durante la Guerra Fría, en países como Estados Unidos poseer el libro podía desembocar en la acusación de traición. Las ideas del manifiesto sirvieron para sostener ideológicamente distintas revoluciones, en especial la Revolución Rusa de 1917, que llevó a la instauración del régimen comunista de la Unión Soviética, pero también la Guerra Civil China y la Revolución Cubana.
¿Por qué se podría considerar El manifiesto comunista el libro más peligroso de la historia? Además de por su impacto en las bases teóricas del movimiento, es, de entre los volúmenes considerados perniciosos, uno de los que más ejemplares ha vendido a lo largo de la historia. Aunque las cifras exactas de ventas son difíciles de rastrear, por su amplia distribución y la circulación de múltiples ediciones no oficiales ligadas a la clandestinidad, se estima que El Manifiesto Comunista ha vendido más de 500 millones de copias desde su publicación en 1848. Además, se ha traducido a múltiples idiomas y se ha distribuido a nivel mundial, especialmente durante el auge del comunismo en el siglo XX.
Con información de Muy Interesante.