Este miércoles 3 de abril, la junta militar de Myanmar anunció un cese al fuego temporal en la guerra civil para sumarse a los esfuerzos de recuperación, a raíz del terremoto de magnitud 7,7 ocurrido la semana pasada en Birmania, del cual resultaron más de 3.000 muertos.
Los líderes de este ejército, dirigentes del gobierno no electo de Myanmar, habló a través de la televisora estatal MRTV para anunciar que este cese al combate durará hasta el 22 de abril, como muestra de compasión hacia las personas afectadas por el terremoto ocurrido el pasado viernes.
Mientras tanto, las fuerzas de resistencia también se han abstenido de luchar en defensa propia, también por motivos de solidaridad. Los esfuerzos de los equipos rescatistas se han extendido hasta hoy, aunque se temía que los bombardeos pusieran en peligro los esfuerzos por recuperar más cuerpos de los escombros.
MRTV reporta que el número de personas heridas por efectos del terremoto se sitúa en los 4.500, aunque otros medios declaran cifras más altas. Antes de la catástrofe, las fuerzas armadas de resistencia habían desatado maniobras ofensivas en áreas afectadas por el terremoto, en su lucha por derrocar al gobierno de Min Aung Hlaing, que tomó el poder en 2021.
Con información de Agencias.
