Un inesperado giro político sacude a Francia: el primer ministro, Sébastien Lecornu, ha presentado su dimisión al presidente Emmanuel Macron este lunes, a menos de un mes de haber asumido el cargo y tan solo un día después de haber anunciado la nueva composición de su Gabinete.
La decisión, que ha sido aceptada por el Elíseo, se produce en medio de una ola de críticas por parte de la oposición y de sectores de la derecha por lo que se percibió como un excesivo continuidad en su Ejecutivo.
Aceptación y brevedad del anuncio
El Palacio del Elíseo confirmó la noticia en un escueto comunicado emitido a primera hora de la mañana, tras una reunión entre el presidente Macron y Lecornu. «El señor Sébastien Lecornu ha presentado la dimisión de su Gobierno al presidente de la República, que la ha aceptado», señaló la presidencia.
Lecornu había defendido la conformación de su equipo el domingo, alegando que «reúne y se asemeja a la base común que nos sustenta en el Parlamento». Incluso destacó la urgencia de su misión: «Estos ministros tendrán la difícil misión de dotar al país de un presupuesto antes del 31 de diciembre y de servir a Francia», resaltó.
»No se dan las condiciones»: La Justificación de Lecornu
Sin embargo, en una declaración a los medios 24 horas después, Lecornu admitió haber asumido una tarea «difícil», incluso «más aún en este momento». A pesar de sus esfuerzos, el exprimer ministro concluyó que «no se dan las condiciones» para gobernar.
Lamentó específicamente la falta de concesiones por parte de los distintos grupos políticos. Indicó que no se dio suficiente valor a lo que él consideraba una «ruptura profunda»: su compromiso de no recurrir al controvertido artículo 49.3 de la Constitución. Este artículo es una herramienta que permite al Gobierno forzar la aprobación de leyes en el Parlamento sin necesidad del respaldo de una mayoría, un mecanismo muy criticado por la oposición.
La dimisión de Sébastien Lecornu, tan solo semanas después de su nombramiento, plantea un serio desafío para el presidente Macron, quien deberá nombrar rápidamente a un sucesor para estabilizar el panorama político francés y asegurar la aprobación del presupuesto nacional.
Con información de agencias
