Afirman que el 80% de harina de maíz de las marcas Juana y Casa han dejado de ser percibidas por los Clap, luego de que se bajaran las santamarías de la empresa
Rosanna Moya
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Desde el 1° de mayo de este año los trabajadores de la empresa Molinos Nacionales C.A. (Monaca) aseguran que viven en completa zozobra por el temor de un posible cierre técnico de esta procesadora.
Jean Carlos Díaz, secretario general del sindicato Sintramaiz, declaró junto al secretario de Reclamo Adolfo Peralta y miembros de la planta que la Inspectoría del Trabajo se pronunció al respecto en beneficio de los trabajadores, sin embargo la situación sigue igual.
Pidieron a la Inspectoría del Trabajo que nuevamente se pronuncie o sancione a Monaca porque de lo contrario serían 150 padres los afectados, ya que en sus opiniones lo más probable es que venga un cierre técnico y esto no es lo que quieren porque afectaría a la población en general.
Afirman que han dejado de percibir beneficios laborales y se les ha negado a los trabajadores la entrada a la planta, a excepción del personal administrativo, más sin embrago se mantienen a las afueras a la espera de que la situación cambie para bien.
Aclararon a la población en general que no por estar al frente de la empresa son guarimberos, sino más bien padres preocupados por el bienestar de toda su familia.
Pidieron al Gobierno nacional se pronuncie al respecto y provea de la materia prima necesaria para que la planta esté operativa nuevamente, debido a que el 80% de la harina de maíz de las marcas Juana y Casa han dejado de ser percibidas por los Clap, tras ser bajadas las santamarías, lo que afecta no solo a bolivarenses, sino también a muchas familias venezolanas.
