Es un gesto inequívoco, pleno de significado y que, por lo general, se asocia a estados melancólicos o de felicidad. A nosotras no nos resultan para nada extraños; pero lo que quizás sí sea la ciencia que los explican. Sigue leyendo y conoce las razones por las que suspiramos.
RAZONES POR LAS QUE SUSPIRAMOS
Un grupo de científicos de la Universidad de California realizó un extenso estudio sobre este fenómeno que ha inspirado poemas y escenas de televisión y cine. En los resultados, publicados en la revista Nature, se detalla que “el cuerpo humano los utiliza como un mecanismo de control. Éste tiene lugar en el tallo cerebral, la misma región que se ocupa del sueño y ritmo cardíaco”.
Así bien, aunque sea muy poco romántico es un comando inconsciente para inflar los alvéolos pulmonares; esos pequeños sacos que regulan el flujo de oxígeno y dióxido de carbono.
DOCE VECES POR HORA
Mark Krasnow, bioquímico de la facultad de Medicina de Stanford, explica que “este centro neuronal no solo controla la respiración; sino el tipo más necesario. Por eso existen los bostezos, las de hipitos cuando lloramos y, también, los suspiros. De lo contrario, el aparato colapsa”.
Tal como señalan los datos de la investigación, esta clase de reflejo se produce cerca de doce veces cada hora; unas veces más profundas –y sonoras– que otras. Solo que muchas veces no nos damos cuenta…
INSTANTES
Sin embargo, los expertos aún no logran descifrar por qué las personas tienden a suspirar cuando viven situaciones particulares. Es ahí donde la emoción que nos caracteriza toma la batuta; ya sea al ver una espectacular obra de arte, o al recordar ese beso con nuestro novio hace un par de días.
Fuente: Emedemujer.com